Europa se encuentra cerca de una guerra devastadora. Se van cerrando vías para una salida negociada, se están enrocando los actores principales, y se levantan escenarios irreversibles
Carlos X. Blanco, La Haine
La situación de Europa occidental es especialmente trágica: casi toda su población vive bajo una cúpula de granito, como en la famosa caverna de Platón. Sometida a las "sombras" que les proyectan los estrategas de la guerra psicológica y la propaganda oficial, los europeos desconocen los planes que de aquí a menos de un lustro se están forjando.
¿Qué planes? Se prevé un aumento del reclutamiento obligatorio en todos los países, así como un incremento significativo en armamento de toda índole.
Es muy posible que se invierta en campos de prisioneros para albergar "enemigos" (rusos y rusófilos) y se vayan introduciendo cambios legislativos encaminados a censurar la información sobre la guerra y sobre la realidad concerniente a la Federación Rusa.
La población europea lleva muchas décadas siendo adoctrinada, y su capacidad de reacción es dudosa; en los tiempos recientes se ha dado una combinación de dos procesos que, en la terminología del filósofo marxista Costanzo Preve, se podrían calificar así: