Mostrando las entradas con la etiqueta Guerra comercial. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Guerra comercial. Mostrar todas las entradas

lunes, 3 de junio de 2024

Europa atrapada en la guerra 2.0 entre Estados Unidos y China

Al cuadruplicar los aranceles sobre los vehículos eléctricos importados de China, Washington lleva la guerra comercial con Pekín a un nivel superior. Europa se encuentra en primera fila de este enfrentamiento y corre el riesgo de convertirse en un mero campo de batalla entre las dos potencias

Martine Orange, Sin Permiso

La reacción fue inmediata. Mientras el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, acababa de confirmar el 14 de mayo que se cuadruplicarían los aranceles a los vehículos eléctricos importados de China, el Canciller alemán, Olaf Scholz, y el Primer Ministro sueco, Ulf Kristersson, manifestaron inmediatamente su desacuerdo con la decisión estadounidense. "Es una mala idea desmantelar el comercio mundial", dijo Ulf Kristersson.

Una vez más, la Unión Europea se ve apartada por su aliado. Los dirigentes europeos, que esperaban que el endurecimiento de la postura estadounidense no fuera más que un paréntesis, ya no pueden albergar la ilusión de que no habrá marcha atrás.

Para frenar el poder económico de China, Estados Unidos ha decidido abandonar el enfoque de laissez-faire que ha prevalecido durante décadas. "Los sueños de los defensores del libre mercado de un mundo sin fricciones en el que los bienes y servicios fluyeran sin problemas de un país a otro han muerto", afirma Larry Elliott, columnista de economía de The Guardian.

miércoles, 28 de abril de 2021

Washington no puede con la economía china

Hedelberto López Blanch, Rebelion

Desde hace unos años Estados Unidos ha hecho lo indecible por tratar de detener el empuje de China pues ha visto cómo el gigante asiático se abre paso para convertirse en la primera economía del planeta.

Resulta que ni las innumerables extorsiones y difamaciones lanzadas por Washington contra Beijing ni los grandes desastres mundiales ocasionados por la Covid-19, han podido detener el avance de ese país asiático cuyo Producto Interno Bruto (PIB) creció 18,3 % en el primer trimestre de 2021.

La Oficina Nacional de Estadística de la nación señaló que el PIB en ese período fue de 24,93 billones de yuanes (3,8 billones de dólares).

El esfuerzo por controlar la pandemia ha sido extraordinario pues le ha permitido remontar los malos momentos económicos del año 2020 cuando el PIB se situó en 2,3 %, el mínimo de los últimos 40 años.

Por su parte, Washington a lo largo de su historia como potencia hegemónica, ha utilizado diversos métodos para hacer valer sus intereses como han sido amenazas o lanzamiento de guerras militares o económicas.

martes, 23 de marzo de 2021

Joe Biden intensifica las sanciones de Estados Unidos contra China

Stephen Lendman, Global Research

Las sanciones son armas de guerra por otros medios.

Son un martillo contra la paz, la estabilidad y las relaciones de cooperación con otros países.

Son un castigo colectivo extrajudicial sobre la población de los países objetivo, lo que prohíbe el derecho internacional.

Son una de las tácticas favoritas de Estados Unidos contra enemigos y adversarios inventados.

Cuando se imponen, no logran sus objetivos geopolíticos.

Sin embargo, Estados Unidos los usa repetidamente contra Rusia, China, Irán y otras naciones que sus legisladores quieren que se transformen en estados vasallos pro occidentales.

Donde va Estados Unidos, otras naciones occidentales lo acompañan con mayor frecuencia.

El lunes, el régimen de Biden en connivencia con Bruselas, Gran Bretaña y Canadá impuso sanciones ilegales a China por abusos inventados de derechos humanos.

martes, 4 de febrero de 2020

Los acuerdos comerciales, esos virus que nos gobiernan con un tufillo racista


Eduardo Camín, CLAE

Después de un año y medio de guerras comerciales, subidas arancelarias, represalias y amenazas que han pasado factura más allá de sus fronteras, había llegado- aparentemente- la hora de rebajar las tensiones.

En efecto los líderes de Estados Unidos y China firmaron este pasado 15 de enero, en la Casa Blanca una tregua, la primera fase de un acuerdo comercial teóricamente más amplio que incluirá temas más espinosos y estratégicos sobre los que hasta ahora, a pesar de la presión, ha sido imposible pactar.

Sin duda que el acuerdo comercial al que llegaron plantea la relevancia internacional de estas dos superpotencias económicas, que tienen grandes consecuencias incluso para países tan alejados de los centros mundiales de decisión.

Si bien el acuerdo suscrito por ambas naciones no resuelve ninguno de los asuntos cruciales que motivaron la escalada y deja sin cambios el grueso de las medidas proteccionistas ya en vigor, al menos despeja la amenaza de nuevos aranceles.

viernes, 4 de octubre de 2019

Cinco claves de la guerra comercial que podría estallar entre la UE y Estados Unidos

Esta disputa se remonta 15 años atrás, a 2004. Donald Trump se relame. La Unión Europea espera que Estados Unidos acepte negociar.

La noticia ha impactado en el mundo económico añadiendo si cabe más incertidumbre a un panorama ya de por sí incierto: a partir del próximo 18 de octubre, Estados Unidos impondrá aranceles a la Unión Europea (UE) sobre más de 1.500 productos. La medida en especial a los cuatro países de la Unión Europea con mayor peso entre ellos España.

La Organización Mundial del Comercio (OMC) ha determinado que Washington puede imponer a la Unión Europea sanciones comerciales por valor de 7.500 millones de dólares (unos 6.900 millones de euros) al año.

Estas son algunas de las claves de esta nueva guerra comercial.

¿Por qué ahora?

Esta disputa se remonta 15 años atrás, a 2004. Entonces el Gobierno de Estados Unidos, presionado por el fabricante de aviones Boeing, denunció a la Unión Europea ante la OMC por los ayudas públicas en su opinión excesivas a Airbus, el otro gran fabricante de aviones del mundo.

Francia, Alemania, España y el Reino Unido ofrecieron a Airbus financiación a un tipo de interés más bajo que los del mercado, lo que permitió a la compañía desarrollar algunos de sus modelos más recientes y avanzados.

martes, 27 de agosto de 2019

Japón le declaró la guerra comercial a Corea del Sur


Marco A. Gandásegui, Alai

La guerra comercial declarada por EEUU a China tiene sus efectos negativos sobre los tránsitos y peajes del Canal de Panamá. Todo indica que la otra guerra comercial entre Japón y Corea del Sur también impactará las finanzas de la vía interoceánica. Se habla mucho de los ‘tuit’ de Trump quien ataca a diario a Pekín por su incesante empuje en materia de producción industrial y exportaciones. Sin embargo, es menos lo que se informa sobre las sanciones japonesas a la economía surcoreana y el peligro que representa para el Canal y Panamá.

Corea fue una colonia japonesa entre 1910 y 1945. Derrotado el imperio japonés en la segunda guerra mundial, Washington pretendió quedarse con Corea como botín de guerra. La resistencia coreana provocó el ingreso de China que contuvo las tropas norteamericanas. Al final la península fue dividida en dos Coreas hasta el día de hoy.

En la actualidad, Corea del Sur compite con Japón exportando varias líneas electro-domésticas, automotrices y de informática. Apenas hace 40 años, Corea y Panamá tenían los mismos niveles en calidad de vida y en productividad. Mientras que Panamá se des-industrializó y se estancó en materia de desarrollo social y crecimiento económico, Corea del Sur se disparó. Las exportaciones de Corea del Sur y Japón tienen como su mercado principal a EEUU. Ambos países dependen parcialmente del Canal de Panamá para que sus mercancías lleguen a los consumidores norteamericanos. Japón es el tercer usuario más importante de la vía acuática y Corea del Sur es el sexto.

martes, 13 de agosto de 2019

Guerra de divisas: una nueva etapa en el colapso capitalista


Nick Beams, wsws

La decisión de la Administración de Trump de etiquetar a China como un "manipulador de divisas", en respuesta a la decisión de Beijing de devaluar ligeramente el renminbi (también conocido como yuan) dejándolo caer a un valor menor a siete por dólar, tiene implicaciones que van mucho más allá de la guerra comercial iniciada por los Estados Unidos.

El impacto inmediato de las decisiones tomadas en Washington y Beijing fue enviar a los mercados financieros a una espiral descendente en todo el mundo, incluso en los Estados Unidos, donde Wall Street experimentó un declive significativo. La caída constituyó un reconocimiento de que la guerra económica ha entrado en una nueva fase aún más peligrosa.

Si bien la turbulencia financiera inicial ha disminuido, con los mercados experimentando un cierto repunte a la luz de un ligero aumento en el valor del renminbi, la guerra de divisas se ha colocado firmemente en la agenda.

Desde la crisis financiera mundial de 2008, todas las principales organizaciones económicas internacionales han advertido continuamente que el proteccionismo y las devaluaciones competitivas de la moneda deben evitarse a toda costa. Estas advertencias se han basado en el entendimiento de que tales medidas fueron un factor crucial en la década de 1930 en profundizar la Gran Depresión y crear las condiciones para el estallido de la Segunda Guerra Mundial.

La prescripción contra las medidas arancelarias proteccionistas ha sido aprobada por la junta en lo que respecta a Estados Unidos. La Administración de Trump no solo ha impuesto aranceles a los productos chinos por valor de cientos de miles de millones de dólares (la última amenaza arancelaria contra China significará que prácticamente todas las exportaciones chinas a EEUU estarán cubiertas), sin que también ha dejado en claro que estos aranceles se utilizarán como un instrumento clave para avanzar su agenda económica en todas partes.

domingo, 28 de julio de 2019

¿Quién va ganando la guerra comercial entre China y EEUU?


Alfredo Jalife-Rahme, La Jornada

En México se suele estar abrumado por los multimedia de Estados Unidos/Gran Bretaña y sus sucursales locales, y no se toma en cuenta dialécticamente la antítesis de la contraparte afectada, como es el caso flagrante de China en la guerra comercial que inició Trump.

Si uno se basa en los tuits de Trump, pues prácticamente China estaría liquidada en forma absurda, lo cual atenta contra la realidad.

Trump es un excelente propagandista como se entrenó 13 años en su programa de reality show The Apprentice (https://imdb.to/2K3Pjtn), además de ser un consagrado blufista de póquer, lo aprendió en sus casinos y con su socio israelí Sheldon Adelson, mandamás de Las Vegas y Macao.

Sucede que hay categorías entre los 193 países de la ONU, cuando unos, como vulgares naciones bananeras sucumben al primer amago de amenazas de Trump, y otros, como las superpotencias, Rusia y China –incluso India– lo paran en seco.

domingo, 21 de julio de 2019

La guerra comercial nunca ha dejado de existir


Juan Francisco Martín Seco, Contrapunto

Las medidas proteccionistas de Trump frente a determinados países han hecho saltar las alarmas y tanto políticos como comentaristas avisan sobre el peligro de una guerra comercial entre naciones. Lo cierto es que la batalla comercial se ha producido siempre desde que existe el mercado. Desde que el mercado adquirió una dimensión internacional, por pequeña que fuese, el aumento de las exportaciones y la reducción de las importaciones se convirtió en un objetivo de todos los Estados.
El mercantilismo inició su andadura allá por el siglo XVI y mantuvo su hegemonía al menos hasta el final del siglo XVIII. Parte del hecho de que el enriquecimiento de una nación se encuentra en el ahorro, en la acumulación de metales preciosos (dinero) mediante el saldo positivo del comercio exterior, por lo que pretende incentivar las exportaciones y limitar, a través de contingentes o aranceles, las importaciones.

Con Adam Smith y David Ricardo se cambia radicalmente la óptica. Se establece el libre cambio, que sostiene que la mejor política en el campo del comercio internacional es la de la absoluta libertad, evitando cualquier tipo de restricciones gubernamentales, de manera que cada país se especialice en aquellas actividades para las que disponga de “ventajas comparativas” con respecto al resto. Este punto de vista tiene una aparente lógica que no es otra que la aplicación de la división del trabajo al comercio internacional. La desigualdad de los países en el punto de partida no constituye, según esa teoría, una objeción seria, no invalida sus conclusiones. El equilibrio se produciría de igual modo a través de la apreciación o devaluación de las divisas, dando lugar a nuevas relaciones de intercambio. Se establece así una nueva estructura de costes en la que todos los Estados presentarían ventajas comparativas.

jueves, 18 de julio de 2019

China y la guerra comercial: una perspectiva amplia


Alejandro Nadal,La Jornada

La guerra comercial que ha desatado Donald Trump en contra de China no es un episodio pasajero que terminará en breve para ser rápidamente olvidado.

Esta es la segunda vez en la historia que Estados Unidos utiliza su poderío económico para frenar el auge de una potencia rival en Asia. Desde la restauración Meiji, que puso fin al shogunato de los Tokugawa en 1868, Japón desarrolló una exitosa política económica y tecnológica dirigida a alcanzar un desarrollo industrial comparable al de Inglaterra o Alemania. En los años 1930 presionó a sus vecinos en Asia para construir la Gran esfera de coprosperidad, que le permitiría garantizar mercados para sus exportaciones y una fuente estable de recursos naturales. Estados Unidos, Inglaterra y Francia no vieron con buenos ojos el surgimiento del nuevo rival asiático. Sus esfuerzos por bloquear el ascenso de la nueva potencia rival fueron un factor importante, aunque no el único, en el surgimiento del militarismo japonés. También sirvieron para detonar la Segunda Guerra Mundial en el Pacífico.

Hoy todo ha cambiado, pero en Asia surgió un nuevo rival. China se convirtió en pocas décadas en una potencia que Estados Unidos considera ya una amenaza. Después de años de guerra y ocupaciones extranjeras, el triunfo del Partido Comunista chino, en 1949, condujo a la creación de la República Popular China. En 1978, Deng Xiaoping introdujo una primera serie de reformas en la conducción de la economía. Entre 1979 y 2013, la economía china mantuvo una tasa promedio de crecimiento anual cercana a 10 por ciento. Al mismo tiempo, Pekín mantuvo la conducción estatal de la estrategia económica y una política industrial y tecnológica que llevó a profundas transformaciones estructurales. China, hoy, aspira a que su moneda sea reconocida como medio de pago y reserva de valor a escala internacional. Su iniciativa de la Nueva Ruta de la Seda es un proyecto de infraestructura y transporte que busca dar una proyección global al poderío económico chino.

sábado, 22 de junio de 2019

Tierras raras, carta de China contra Trump


Hedelberto López Blanch, Rebelión

Tras lanzar una estruendosa guerra económica contra varios países del mundo y fundamentalmente contra China para tratar de mantener su ya debilitada hegemonía mundial, a la Administración estadounidense de Donald Trump ahora le preocupa que la política de sanciones se le convierta en un bumerán.

Ya le empiezan a salir obstáculos hasta en su propio país pues recientemente la Cámara de Comercio norteamericana expresó a la cadena CNBC que “la utilización de aranceles, con el aumento de amenazas a nuestra economía, va a perjudicar al país y también crea incertidumbre con nuestros socios”.

Hace pocos días, más de 600 importantes compañías estadounidense, entre estas Walmart, Costco, Target, Levy Strauss, Get y FootLocker, en una carta enviada a Trump, lo instaron a eliminar los gravámenes actuales y cesar la guerra comercial con el gigante asiático.

En la misiva se expresa que las tarifas adicionales (con las que amenazó el mandatario) tendrán un impacto negativo para todos los ciudadanos estadounidenses. Se calcula que otra subida de aranceles supondrá la pérdida de más de 2.000.000 de puestos de trabajo y recortaría el Producto Interno Bruto (PIB) del país en un 1 %, además de costar cerca de 2.000 dólares a cada familia estadounidense.

martes, 18 de junio de 2019

Las amenazas comerciales de Trump son realmente una Guerra Fría 2.0


Michael Hudson, Sin Permiso

El Presidente Trump ha amenazado al Presidente de China, Xi que si no se encuentran y hablan en la próxima reunión del G-20 en Japón, el 29-30 de Junio, los Estados Unidos no va a suavizar su guerra de tarifas y sanciones económicas contra las exportaciones y tecnológicas chinas.

De hecho, habrá alguna reunión entre líderes chinos y estadounidenses, pero nada que pueda considerarse una negociación real. Estas reuniones están normalmente preparadas de antemano, por parte de funcionarios especializados que trabajan juntos para preparar un acuerdo que anuncien sus jefes de Estado. Pero esta preparación no ha tenido lugar, ni puede tener lugar. Trump no delega su autoridad.

Trump abre sus negociaciones con una amenaza. No cuesta nada, y nunca se sabe (o al menos, él nunca sabe) si puede conseguir una bicoca. Su amenaza es que los EEUU pueden dañar a su adversario, a menos que el país se comprometa a respetar la lista de deseos de los Estados Unidos. Pero en este caso la lista es tan poco realista que a los medios de comunicación les da vergüenza hablar de ello. Los EEUU están haciendo peticiones imposibles de rendición económica, que ningún país puede aceptar. Lo que parece ser la superficie sólo de una guerra comercial es realmente una Guerra Fría 2.0 en toda regla.

sábado, 15 de junio de 2019

India aumenta impuestos a productos de Estados Unidos


India se suma a la guerra comercial y aumentará desde este domingo los aranceles a 29 productos estadounidenses, una decisión anunciada el año pasado pero que había sido varias veces postergada, según indica hoy la prensa india. El gobierno de Nueva Delhi había decidido en junio de 2018 subir los aranceles a una serie de productos estadounidenses --entre ellos manzanas y almendras--, tras el rechazo de Washington a eximir a India de un alza de tasas sobre el acero y el aluminio. Pero la aplicación de esta medida fue postergada varias veces, mientras se producían negociaciones de India con Estados Unidos

Sin embargo, la decisión hace algunos días del presidente estadounidense Donald Trump de excluir a India de la lista de países con estatuto preferencial parece haber desencadenado la decisión del ejecutivo de Nueva Delhi. Estados Unidos exportó a India por valor de 142 mil 100 millones de dólares en 2018, según algunas estimaciones. Su déficit comercial con este país asiático fue de 24 mil 200 millones de dólares, según cifras oficiales.

miércoles, 5 de junio de 2019

Los temores a una recesión mundial aumentan a medida que disminuye la actividad industrial


La actividad industrial de Europa, Estados Unidos y la mayoría de los países asiáticos se redujo el mes pasado debido a la escalada de la guerra comercial entre Washington y Pekín, aumentando los temores de una desaceleración económica mundial. Es probable que estos indicadores de crecimiento se deterioren aún más en los próximos meses, ya que las tarifas comerciales más altas hacen mella en el comercio mundial y hacen más mella en el sentimiento de los consumidores y las empresas, lo que conlleva pérdidas de empleos y retrasos en las decisiones de inversión. Estamos en las puertas de una recesión mundial y una nueva carrera hacia el fondo de las tasas de interés si las tensiones comerciales no se alivian en la próxima cumbre del G-20 en Osaka, Japón, a fines de junio, cuando los presidentes Donald Trump y Xi Jinping podrían reunirse.

En China, el latido económico de Asia, el índice Caixin / Markit Manufacturing Purchasing Managers 'Index (PMI) mostró una modesta expansión en 50.2, ofreciendo a los inversores un alivio a corto plazo después de que un indicador oficial del viernes mostró una contracción. Sin embargo, las perspectivas siguieron siendo sombrías a medida que el crecimiento de la producción disminuyó, los precios de las fábricas se estancaron y las empresas fueron las menos optimistas en cuanto a la producción, ya que la serie de encuestas comenzó en abril de 2012. Los PMI estaban por debajo de los 50 puntos que separaban la contracción de la expansión en Japón, Corea del Sur. Malasia, Vietnam y Taiwán estuvieron por debajo de las expectativas y mejoraron ligeramente en Filipinas. El impacto adicional de la escalada de las tensiones comerciales no va a ser bueno para el comercio mundial y si la demanda en los Estados Unidos, China y Europa continúa a la baja, la recesión mundial será ievitable.

sábado, 1 de junio de 2019

La trampa de Tucídides y la tecnología de quinta generación

Tres décadas de crecimiento de China han reducido del 27% al 16% la cuota de los EEUU en el mercado económico mundial mientras que la de China pasó del 2% al 18% en 2016


Willy Meyer, Mundo Obrero

Fue el ascenso de Atenas y el temor que eso inculcó en Esparta lo que hizo que la guerra fuera inevitable”
Tucídides (La guerra del Peloponeso. Sigl.V a.C.)

Historiadores, analistas, diplomáticos y expertos en relaciones internacionales citan con frecuencia lo que el profesor de Harvard, Graham Allison, califica como la “trampa de Tucídides”, referida a la tensión estructural letal que se produce cuando una potencia nueva, reta a otra dominante, generando un desequilibrio de poder, entre las dos potencias rivales, que, inexorablemente se resuelve mediante una guerra.

En este caso, la confrontación de los Estados Unidos frente al imparable ascenso de China, como futura superpotencia mundial económica y comercial, apunta directamente a esa trampa.

A la guerra económica y comercial declarada a China por parte de la Administración Norteamericana, se suma ahora la batalla por la tecnología de quinta generación (5G) de conexión inalámbrica que, por su velocidad de red y su capacidad de conexión a miles de aparatos electrónicos, la convertirán en la protagonista de la próxima revolución industrial tecnológica. Según la patronal estadounidense de las telecomunicaciones (RACTYA), pasaremos de una tecnología como la actual 4G que puede conectar hasta 2.000 dispositivos por kilómetro cuadrado a la 5G, que podrá cubrir un millón de aparatos (electrodomésticos, cámaras, sensores de todo tipo, vehículos o hasta drones) en el mismo espacio.

martes, 28 de mayo de 2019

EEUU y el sorpasso chino


Xulio Ríos, Alai

Las tensiones comerciales entre China y EEUU subieron un nuevo escalón tras el anuncio de nuevas medidas por parte de la Casa Blanca que intentan cortar de cuajo el desarrollo tecnológico del país oriental. ¿Pero está Washington a tiempo y en condiciones de evitar el sorpasso chino?

En términos de paridad de poder de compra, la economía china superó a la de EEUU en 2014; actualmente, representa el 18 por ciento del PIB global; según las previsiones, en torno a 2025 podrá equipararse a la de EEUU en términos nominales y en 2050 representará el doble de su valor. Precisamente, en 2014, Huawei creó HiSilicon en secreto, entre otros para reducir su dependencia tecnológica menguando el nivel de su vulnerabilidad ante contingencias como las actuales. No sabemos cuántos más secretos hay por ahí guardados ni cuanto pueden ayudar a amortiguar los golpes de la Administración Trump o cuanto las estratagemas de EEUU pueden retrasar sus planes de liderar el 5G en todo el mundo.

En el campo tecnológico, la inversión de la China en I+ D el pasado año representó el 2,8 por ciento de su PIB y está a un paso de superar a EEUU. Con más de 4 millones de ingenieros operando en el sector, se estima que en 2019 se situará a la cabeza en el registro mundial de patentes, destronando décadas de reinado estadounidense. La competitividad de China en materia de inteligencia artificial, manufactura inteligente, robótica, vehículos eléctricos, etc., aun avanzando a ritmos desiguales, parece imparable. En muchos ámbitos lleva años de adelanto con respeto al Occidente desarrollado. La que era fábrica del mundo hasta hace poco tiempo representa hoy la gran plataforma de innovación global. Y puede serlo ya al margen de EEUU en muchos aspectos. Y quieren hacerlo así, descartando bajar la oreja como hizo Japón en los años noventa.

lunes, 27 de mayo de 2019

Motivos de la tensión chino-estadounidense



Manuel E. Yepe, Alai

Philippe Waechter, economista jefe de la administradora de activos francesa Ostrum Asset Management, formuló el 17 de mayo último un interesante análisis acerca de las actuales tensiones entre China y Estados Unidos. El experto francés señala que los twits de Donald Trump del 5 de mayo aumentaron las tensiones entre Washington y Beijing, relanzando las discusiones sobre los términos de un acuerdo entre ambas potencias en el ámbito comercial. Las represalias chinas contra las importaciones de EEUU en respuesta a los nuevos aranceles estadounidenses ponen en tela de juicio el largo período de calma comenzado después de la reunión del G20 el primero de diciembre del año pasado.

El deseo de Trump de imponer nuevas restricciones a China refleja su voluntad de repatriar puestos de trabajo, especialmente en el sector manufacturero, y también de reducir la dependencia en China de Estados Unidos. En 2018, la balanza exterior de EEUU con China era deficitaria en más de 400 mil millones de dólares. La contrapartida de este superávit chino con EEUU reflejaba una financiación china de la economía de EEUU a través de la compra de bonos federales estadounidenses. La lógica era que los productos chinos en el mercado estadounidense financiaban la economía de EEUU para compensar la falta de ahorro allí. El funcionamiento del comercio chino-estadounidense era a base de complementariedad, pero este equilibrio está cambiando ahora de naturaleza porque el peso de China en la financiación de la economía estadounidense ha ido disminuyendo.

jueves, 23 de mayo de 2019

Estados Unidos pide a Corea del Sur unirse a campaña contra Huawei


La guerra comercial entre Estados Unidos y China se está convirtiendo gradualmente en una guerra comercial global de dominio geopolítico y comercial entre las esferas de influencia entre ambos países. Japón se ha alineado con las medidas de Donald Trump y Toshiba, Panasonic y ARM Holdings se han sumado al boicot contra Huawei. Australia y Nueva Zelanda también han cedido a las presiones de Washington y han aceptado poner fin a sus relaciones con la empresa tecnológica del gigante asiático. Ahora la presión de Estados Unidos se dirige contra Corea del Sur, un socio comercial importante para China que EEUU espera poner entre sus aliados para destruir a Huawei.

Como informa el periodico coreano Chosum, Washington está presionando a Seúl para que corte sus lazos con Huawei y se ponga del lado de EEUU en una guerra en la cual Corea del Sur prefiere estar al margen dado que aún quedan resabios de la guerra de Corea. El gobierno coreano fue enfático al señalar "Es difícil para nosotros intervenir en la toma de decisiones de las empresas privadas", asestando un duro golpe a Washington. Pese a ésto, el gobierno de Trump ha insistido, por varios canales, amenazando que "el uso de productos de Huawei puede causar serios problemas de seguridad para Corea".

miércoles, 22 de mayo de 2019

La prohibición de Trump a Huawei puede hacer explotar a Apple


De todas las grandes multinacionales estadounidenses que hacen negocios en China, las recientes medidas tomadas por Donald Trump han hecho que Apple se encuentre en una posición particularmente precaria. Olvidó Trump que los iPhones que se venden en EEUU estarán sujetos a nuevas tarifas, ya que Apple las construye en China, la China castigada con nuevos aranceles de 25%, mientras que a su vez los consumidores chinos, de quienes la compañía depende para el crecimiento de sus ventas, podrían evitar la marca Apple en respuesta a las continuas amenazas de Donald Trump, como parte de su guerra comercial.

Se olvida Trump también que a finales del año pasado, Apple provocó un colapso en el mercado cuando reconoció una caída de sus ingresos trimestrales por primera vez en 16 años como resultado del desplome en las ventas de iPhone en China. Lo del último trimestre del año pasado se repetirá este 2019 como fruto del constante hostigamiento de Trump a China. Esta vez el boicot a la empresa estadounidense no se hará esperar ante la amenaza a una empresa emblemática del gigante asiático como es Huawei. Instalar a Huawei en una lista negra, prohibir a las empresas estadounidenses hacer negocios con Huawei y cortar de la noche a la mañana los negocios y compromisos adquiridos con esta empresa es una de las decisiones más desafortunadas que ha tomado el gobierno de Estados Unidos. Solo comparable a la mentira de las "armas de destrucción masiva" para iniciar una guerra con Irak.

martes, 21 de mayo de 2019

Estados Unidos en la encrucijada por fuego cruzado con China


Infineon Technologies AG, uno de los fabricantes de chips más grandes de Europa, dijo que la mayoría de los productos que provee a Huawei no están sujetos a las restricciones de EEUU. Ahora podemos esperar que China redoble los esfuerzos para desplegar un programa de sistemas operativos para smartphones, diseñe sus propios chips y desarrolle su propia tecnología de semiconductores. Además, Huawei ha almacenado suficientes chips y otros componentes esenciales para mantener su negocio en funcionamiento durante al menos tres meses. Infineon Technologies AG, es uno de los fabricantes de chips más grandes de Europa y sus productos no están sujetos a las restricciones de EEUU. Este fabricante de chips puede "hacer adaptaciones en su cadena de suministro internacional", detalla Bloomberg. La empresa tecnológica AMS AG, con sede en Austria, también informó que no suspenderá sus envíos a Huawei. La compañía china representa el 1,3% de las ventas de Infineon y el 3,7% de los ingresos de AMS.

El Departamento de Comercio de EEUU asestó un duro golpe a Huawei al ponerlo en una Lista negra y prohibir a las empresas estadounidenses hacer negocios con la empresa china. Fabricantes de chips estadounidenses, como Intel Corp., Qualcomm Inc., Xilinx Inc. y Broadcom Inc. han dicho a sus empleados que no enviarán suministros a Huawei hasta nuevo aviso, según personas familiarizadas con sus medidas. Pero la decisión del gobierno de Trump de vetar a Huawei le puede salir muy caro a los gigantes tecnológicos de Estados Unidos. El temor a las represalias que puede tomar el gobierno chino no se han dejado esperar y ayer la bolsa de Wall Street se vio fuertemente afectada por el hundimiento de pesos pesados como Apple, Intel, Tesla y el mismo Google.

LinkWithin

Blog Widget by LinkWithin