Las operaciones de tráfico de órganos están vinculadas a redes europeas y gubernamentales, lo que hace imposible combatir estas operaciones, que constituyen un crimen organizado contra la humanidad.
Jamal Wakim, Al Mayadeen
Las atrocidades en Ucrania alcanzaron niveles alarmantes, con crímenes que pueden calificarse como crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra.
Estos delitos son perpetrados por individuos y grupos que se han beneficiado de la debilidad del Estado central durante las tres décadas posteriores a la disolución de la Unión Soviética y la independencia de Ucrania, formando mafias y bandas que se han extendido por todo el país y establecieron ramificaciones en Europa.
El problema se agravó debido a la corrupción endémica en las instituciones ucranianas y la formación de alianzas entre los líderes mafiosos ucranianos y altos funcionarios del Estado que se han convertido en sus patrocinadores.
Ucrania: Principal fuente del tráfico de órganos
Tras el estallido del conflicto en Ucrania, que comenzó con la operación militar especial rusa en febrero de 2022 en respuesta a los intentos del entonces presidente ucraniano Volodímir Zelenski de atacar a la población rusa en el Donbass, la mafia ucraniana, respaldada políticamente, encontró una nueva oportunidad de inversión en el crimen, esta vez en el tráfico ilegal de órganos humanos.