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martes, 1 de mayo de 2018

El día y la noche del trabajador

Emir Sader

Nunca como ahora, en todo el mundo, tanta gente vive de su trabajo, pero nunca como ahora, en todo el mundo, tanta gente trabaja sin sus derechos garantizados.

Una sociedad cuya riqueza es resultado de lo que hacen diariamente los trabajadores, cada vez les reconoce menos, cada vez garantiza menos sus empleos, sus derechos, sus salarios mínimamente dignos.

Es alrededor de las actividades del trabajo que vive la mayoría aplastante de la gente en todo el mundo. Entre despertar muy temprano, gastar algunas horas en un trasporte muy malo, cumplir una larga e intensa jornada de trabajo, retomar el mismo trasporte de retorno, llegar a la casa y recomponer las energías para reempezar la misma jornada al día siguiente, gira la vida de millones y millones de personas en todo el mundo.

Para la gran mayoría, se vive o se sobrevive para trabajar. No hay tiempo para mucho más. Ni se puede escoger en qué trabajar. Cuando hay trabajo

jueves, 1 de mayo de 2014

Las falacias neoliberales sobre el trabajo

Emir Sader, AlaiNet

Entre sus propuestas de desregulación, el neoliberalismo puso fuerte énfasis en la de “flexibilización laboral”. Estas palabras atrayentes – así como la de “informalización” – lo que esconden es la precarización de las relaciones de trabajo, es el trabajo sin contrato.

Esta fue uno de las trasformaciones más importantes del neoliberalismo. Junto a ella, promovió la desaparición de las temáticas del mundo del trabajo. El alza del desempleo y del trabajo precarizado son justificados por lo que llaman de “desempleo tecnológico”, alegando que la tecnología necesita menos mano de obra, produciendo más con menos trabajadores, dados los aumentos de productividad.

El significado del 1º de mayo, dia del Trabajo

Iñaki Gil de San Vicente, Rebelión

1.- Hechos
El 1 de mayo de 1886 se inició una huelga obrera en Chicago para reducir a ocho horas diarias el tiempo de trabajo. Esta huelga era parte de un amplio movimiento de las masas obreras y populares en los EEUU para reducir la durísima jornada de trabajo que llegaba hasta las 12 y 14 horas durante seis días a la semana, en muy penosas condiciones laborales, con disciplinas muy duras, con despidos inmediatos, con abusos de todas clases incluidos los sexuales contra las trabajadoras, con explotación infantil, sin derechos sociales ni políticos, sin cobertura sanitaria pública, etcétera. Condiciones espantosas que también se sufrían en la Europa del momento, impuestas a la fuerza desde los orígenes mismos del capitalismo industrial a finales del siglo XVIII en Inglaterra e incluso antes, en el capitalismo manufacturero, impuestas muchas veces con la intervención militar salvaje. En 1868 el movimiento obrero había logrado gracias a muy duras luchas anteriores conquistar la jornada de 8 horas pero solo para un sector de la clase: el explotado en las empresas públicas y servicios estatales, aunque la patronal boicoteó esa ley todo lo que pudo. Y en 1874 se redujo la jornada a 8 horas a otras franjas obreras.

sábado, 10 de diciembre de 2011

¿Quien trabaja más en Europa?


Cada vez que se habla de trabajo y productividad existe el estereotipo de la eficiencia alemana y la indolencia griega. Se dice que los griegos son unos vagos y que los alemanes son los campeones de la productividad en Europa. Sin embargo, estos datos publicados por la Oficina de Estadísticas Europea, para las horas trabajadas en los 27 países de la Unión Europea dicen otra cosa: los alemanes no son los más productivos de Europa y los griegos no tienen nada de flojos.

Lea el artículo en El Blog Salmón

jueves, 1 de mayo de 2008

La historia del 1° de Mayo, un día marcado por la sangre


El día del trabajo, que se celebra hoy en casi en todo el mundo, tiene una historia manchada de sangre y muerte. Su origen está en los movimientos sindicalistas formados bajo el impulso de la Primera Internacional y las ideas de Marx sobre la fuerza de trabajo, en la segunda mitad del siglo XIX. Esta es una época de pleno crecimiento de las grandes industrias y con una vertiginosa expansión de las ciudades que genera el abuso y la explotación de importanrtes contingentes humanos. En ese contexto, los trabajadores estaban totalmente desamparados trabajando hasta 16 horas diarias y con salarios miserables.

Esta situación de abuso y explotación patronal generó la creación de sindicatos para defender los derechos laborales. En noviembre de 1884 se celebró en Chicago el IV Congreso de la American Federation of Labor. Aquí se propuso que a partir del 1 de mayo de 1886 se obligaría a los patrones a respetar una jornada laboral de 8 horas diarias advirtiendo que de no ser así se recurriría a la huelga indefinida.

El presidente Andrew Johnson, a favor de la propuesta, promulgó la ley que establecía la jornada de trabajo en 8 horas diarias. Sin embargo, los empresarios se negaron a ella y así fue como más de 350 mil trabajadores fueron a la huelga y paralizaron al país. Marchas, disturbios y enfrentamientos se produjeron entre el 1° y el 4 de Mayo de ese año, con un saldo de 38 muertos y 120 heridos. Los siete principales dirigentes laborales fueron condenados a muerte el 9 de octubre de 1886 y cinco de ellos fueron ahorcados el 11 de noviembre de 1887.

Después de realizarse la Segunda Internacional en julio de 1889, en París, se fijó el día 1° de mayo como el día de ratificación de los derechos de los trabajadores. Al año siguiente, en Berlín, quince naciones sentaron las bases para velar por el buen arbitrio de las leyes laborales y crearon la Oficina Internacional del Trabajo que más tarde pasó a ser la OIT, con residencia en Ginebra y bajo supervisión de la ONU.

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