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miércoles, 6 de febrero de 2019

Desigualdad y concentración de mercado

Alejandro Nadal, La Jornada

Muchos estudios muestran que la concentración industrial y el incremento del poder de mercado de unas cuantas empresas ha aumentado en décadas recientes. Al mismo tiempo, se reconoce que la desigualdad se ha convertido en uno de los rasgos más característicos del capitalismo. Entonces, es natural que surja una nueva pregunta: ¿hasta qué punto está relacionada la concentración de poder de mercado con la desigualdad?

Tradicionalmente, el análisis de las consecuencias del poder de mercado se ha llevado a cabo mediante el efecto sobre los consumidores. Se parte del supuesto de que las empresas con cierto poder de mercado pueden incrementar los precios por encima del nivel que correspondería a una situación de mayor competencia. La capacidad de una empresa para aumentar su precio en cierto margen (o mark up) está relacionado con el grado de concentración industrial. Un estudio reciente (janeeckhout.com) demuestra que el poder de mercado en Estados Unidos se mantuvo más o menos estable entre 1955-1980, pero desde ese último año se incrementó tanto que ahora permite cargar un mark up de hasta 61 por ciento sobre costos marginales.

Esos aumentos de precios ayudan a contrarrestar la caída en la tasa de ganancias que muchos autores marxistas han documentado y, por supuesto, están asociados con pérdidas de bienestar para los consumidores. En el plano macroeconómico, esa tendencia a una mayor concentración puede contribuir a empeorar la desigualdad que ya existe.

jueves, 9 de noviembre de 2017

EEUU tiene una enfermedad: concentración industrial

Alejandro Nadal, La Jornada

En enero de 1916 el entonces presidente Woodrow Wilson designó a Louis Brandeis como ministro de la Suprema Corte. El debate que siguió en el Congreso fue uno de los más impetuosos y duró más de cuatro meses. La oposición desconfiaba de las inclinaciones progresistas de Brandeis, en especial en lo que se refería a la legislación antimonopolios. Al final, obtuvo la aprobación y a lo largo de los siguientes 23 años este jurista dejó una profunda huella en las decisiones del más alto tribunal estadounidense.

La política antimonopolios se basaba en la ley Sherman anti-trust de 1890. Hay que recordar que en el último cuarto del siglo XIX la economía estadounidense atravesó un periodo de fusiones y adquisiciones que llevaron a la consolidación de grandes corporaciones en casi todas las ramas de la industria y los servicios.

Los orígenes de esa ley no se relacionan con el tema del bienestar de los consumidores (afectado por prácticas no competitivas en la fijación de precios), sino por la desmedida influencia política que adquirían las grandes empresas. Brandeis compartía esta visión y a lo largo de su carrera luchó contra la aglutinación de poder financiero, industrial y político que distorsionaba no sólo las estructuras económicas, sino el entramado de la democracia en la sociedad estadounidense. Su obra inspiró la aprobación de la ley Clayton (1914), que complementó y facilitó la aplicación de la ley Sherman, y todavía más importante, la ley Glass-Steagall (1932), que separó las actividades de los bancos comerciales y las de la banca de inversión. Esta última dio estabilidad al sector bancario durante siete décadas y cuando fue derogada bajo la administración Clinton en 1999 abrió las puertas a la crisis financiera de 2007.

jueves, 2 de noviembre de 2017

Concentración económica, poder político y desigualdad

Alejandro Nadal, La Jornada

Desde hace años se sabe que la tendencia hacia una mayor concentración industrial y centralización del poder económico es una característica sobresaliente de la economía de Estados Unidos. Los datos económicos lo han confirmado periódicamente, por ejemplo con información sobre control de parcelas de mercado o sobre el valor de mercado de los activos de una empresa. Y el crecimiento del sector financiero y sus oportunidades de espacios especulativos agravó esta tendencia.

Recientemente Luis Zingales (economista de la Universidad de Chicago) publicó un estudio sobre la dinámica de este proceso en Estados Unidos. Una de sus principales conclusiones es que el vínculo entre poder de mercado y la influencia política forma un círculo vicioso. El mayor poder económico es utilizado para incrementar el dominio político mediante actividades que van desde el cabildeo más o menos ilegal, hasta lo que se ha llamado la captura regulatoria. Este último fenómeno consiste en debilitar y controlar las agencias regulatorias encargadas de aplicar la normatividad vigente. Para Zingales este proceso es comparable al que existía en la dinastía de los Medici en el siglo XV en Italia: el dinero era usado para obtener poder político y el poder político era empleado para ganar más dinero. Así de sencillo era el círculo vicioso de los Medici.

Para apreciar la importancia de este análisis hay que recordar que la teoría económica dominante considera a las empresas como entidades que bien pueden tener poder económico, pero no pueden afectar las reglas del juego político. Sin embargo, en el mundo real las grandes corporaciones contratan intermediarios que se aseguran de introducir nuevas leyes, modifican las vigentes y adecuar los reglamentos existentes para reducir los costos de las empresas dominantes o para abrir el paso a todo tipo de prácticas monopólicas en detrimento de consumidores y del medio ambiente. Los ejemplos de todo lo anterior abundan, ya sea en el ámbito de la salud humana, sanidad vegetal, seguridad internacional o estabilidad financiera. El despliegue de actividades de los grupos de cabildeo o lobby de la industria farmacéutica, agro-alimentaria, militar o del sector financiero en Washington son un testimonio elocuente de cómo opera la cadena de transmisión del círculo vicioso identificado por Zingales.

jueves, 25 de mayo de 2017

Concentración económica y poder político

Alejandro Nadal, La Jornada

El discurso político en casi todo el mundo hace constante referencia a la competencia en el mercado y su contribución al crecimiento y la eficiencia. México y Europa no son casos aislados, pero en ningún país el mensaje es tan explotado como en Estados Unidos.

La idea de que la competencia entre empresas conduce a menores precios y mayor bienestar del consumidor es la espina dorsal de la ideología y política económica neoliberal. Su corolario es que entre menos regulación, las fuerzas del mercado enfrentan menores obstáculos para alcanzar eficiencia y prosperidad.

En la jerga de la teoría económica dominante, la que se inculca a los estudiantes de economía, este es el mundo de la competencia perfecta. Es un ámbito fantástico en el que coexisten millones de pequeñas empresas que carecen de poder económico y no tienen ningún control sobre los precios.

En las antípodas de esta quimera se encuentra el mundo real, en el que existe un altísimo grado de concentración en casi todos los rubros de la actividad económica. La lista de ramas de actividad en las que la concentración se ha incrementado significativamente en las últimas dos décadas incluye la farmacéutica y cosméticos, alimentos procesados y bebidas, insumos agrícolas, cerveza, óptica, hotelería, transporte aéreo, comercio al menudeo, bienes raíces y bancos. El problema no se limita a Estados Unidos, en donde sólo dos empresas producen toda la pasta de dientes que se consume en ese país. Por ejemplo, como resultado de la fusión de Bayer y Monsanto (anunciada en 2016) una sola empresa gigantesca controlará el 25 por ciento del mercado mundial de semillas y plaguicidas.

martes, 19 de enero de 2016

Desigualdad aumenta a pasos agigantados: los 62 más ricos igualan al 50% más pobre de la población mundial


El 1 por ciento más rico del planeta es ahora más rico que el resto de la humanidad combinada (el 99 por ciento restante) de acuerdo al último Informe Oxfam publicado este lunes. Según este informe, la concentración de la riqueza aumenta a pasos agigantados: mientras el año 2010, 388 personas tenían el equivalente al 50% de la riqueza total. Hoy, las 62 personas más ricas de la lista de Forbes tienen la misma riqueza que los 3.500 millones de personas más pobres. De acuerdo al estudio, la riqueza del 1 por ciento más rico aumentó 44 por ciento en los últimos cinco años, a US$1760000000000 (1,76 billones de dólares), mientras que la riqueza de la mitad inferior cayó 41 por ciento, a US$1000000000000 (1 billón de dólares).

La organización utiliza estas estadísticas para argumentar que la creciente desigualdad supone una amenaza para la expansión económica y la cohesión social. Estos riesgos ya se han observado en países como EEUU, Grecia y España, y son los que siembran las tensiones en las calles de América Latina y el Medio Oriente. Oxfam advierte que los gobiernos deben tomar medidas para reducir la polarización, y uno de estos pasos es poner fin a los paraísos fiscales que ayudan a los más ricos a ocultar más de 7600000 millones de dólares (US$7,6 billones).

Las estadísticas de Oxfam se basan en los informes sobre la riqueza mundial entregadas anualmente por Credit Suisse, que tiene la ventaja de estimar el patrimonio de los principales impulsores de las grandes fortunas. En mayo pasado, la OCDE publicó un informe sobre las desigualdad en el mundo y aunque su metodología era totalmente diferente, la institución llegó a las mismas conclusiones que Oxfam: "Durante los últimos 30 años, las desigualdades de ingresos han aumentado en la mayoría de países de la OCDE, y a veces llegando a niveles históricos. El Coeficiente de Gini - una medida común de la desigualdad de ingresos que oscila entre 0 (total igualdad de ingresos) y 1 (cuando el total de ingresos va a una sola persona) - se ubica actualmente en un promedio de 0,315 en los países de la OCDE, supera 0,4 en Estados Unidos y Turquía y llega a 0,5 en Chile y México". Mientras el 1 por ciento más rico ha aumentado su riqueza, el 40% más pobre se ha hecho más pobre.

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lunes, 14 de diciembre de 2015

La concentración de la riqueza es el problema

Julián López y Fernando Luengo, Sin Permiso

Mientras que la mayoría de la población ha sufrido un continuo deterioro de sus condiciones de vida –caída de los salarios, prolongación de las jornadas laborales, destrucción de empleo, reducción del gasto social público y aumento de los impuestos indirectos- una minoría se ha enriquecido, conquistando nuevos privilegios. Como resultado de ello, la desigualdad se ha disparado en los últimos años.

Abundan los estudios al respecto. Entre otros, los realizados por instituciones tan conservadoras como el Fondo Monetario Internacional y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. Uno de los más interesantes es el que cada año realiza el Credit Suisse, que lleva por título Global Wealth Report y que se centra en la distribución y la concentración de la riqueza a escala nacional e internacional.

La concentración de la riqueza es notablemente superior a la del ingreso; de ahí el interés de poner el acento en la primera. Un indicador habitualmente empleado para medir la desigualdad es el Índice de Gini, que puede tomar valores comprendidos entre 0, mayor equidad, y 1, mayor inequidad. En España, este indicador alcanza el valor de 0,35, según Eurostat, si se centra en la renta, y asciende hasta el 0,67 si considera el patrimonio neto de los individuos, siguiendo los datos que ofrece el Credit Suisse

jueves, 7 de mayo de 2015

Las cifras de la deuda

Jérôme Duval, elsalmoncontracorriente.es/

La nueva publicación del Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo (CADTM), Las cifras de la deuda 2015, ahora disponible en español, francés e inglés, constituye un documento de especial relevancia para cualquier persona que quiere investigar o simplemente tener a su alcance herramientas para combatir las desigualdades, consecuencias de un sistema capitalista devastador basado en el endeudamiento.

Tal y como establece el manifiesto político de la red internacional del CADTM, «tanto en el Norte como en el Sur del planeta, la deuda constituye un mecanismo de transferencia de riquezas creadas por los trabajadores y trabajadoras y los pequeños productores y productoras a favor de los capitalistas. El endeudamiento es utilizado por los prestamistas como un instrumento de dominación política y económica». Ahí se pueden observar desigualdades enormes recordando el famoso lema “somos el 99%” del movimiento Occupy Wall Street, de la ’clase pueblo’ en contra de la clase capitalista, el poderoso 1% restante. Así, la publicación recopila muchísimos datos como el que nos dice que “En 2013, el 0,7 % de la población mundial acaparaba el 41 % de la riqueza mundial mientras que el 68,7 % de la población tenía une riqueza conjunta de apenas el 3% del total mundial.”

domingo, 23 de febrero de 2014

Ex-funcionaria del Banco Mundial revela cómo la elite corporativa domina al mundo


Karen Hudes es graduada de la escuela de leyes de Yale y trabajó en el departamento legal del Banco Mundial durante 20 años. De hecho, fue despedida por revelar información sobre la corrupción dentro del Banco Mundial, su puesto era el de “asesora jurídica superior”. Ella tuvo una perspectiva clara para visualizar cómo la élite corporativa domina el mundo, y la información que está revelando es absolutamente sorprendente. De acuerdo a Karen Hudes, esta élite utiliza un núcleo hermético de instituciones financieras y mega-corporaciones que dominan el planeta.
La meta es controlar, nos quieren a todos como esclavos de la deuda, quieren a todos nuestros gobiernos esclavos a la deuda, y quieren a todos nuestros políticos adictos a las gigantes contribuciones financieras que ellos canalizan a las campañas. Como la élite también es dueña de todas los medios de información principales, esos medios nunca revelarán el secreto de que hay algo fundamentalmente errado en la manera en que nuestro sistema trabaja, señala Karen Hudes.
Esta vez no es un paranoico de las teorías de conspiración el que dice estas cosas. Esta es una abogada educada en Yale que trabajó en el Banco Mundial por dos décadas. El siguiente resumen de sus credenciales viene directo de su sitio web:

“Karen Hudes estudió Leyes en la Escuela de Leyes y Economía de la Universidad de Amsterdam. Ella trabajó en el Banco de Exportaciones e Importaciones de Estados Unidos de 1980-1985 y en el Departamento Legal del Banco Mundial de 1986-2007…”

sábado, 14 de diciembre de 2013

Impacto económico y político de la concentración económica mundial

Marcelo Justo, Página 12

A fines de 2011, un estudio de la Escuela Politécnica Federal de Zurich, “The network of global corporate control”, sacudió el debate sobre la concentración del poder a nivel mundial. La base de datos del estudio de Stefania Vitali, James B. Glattfelder y Stefano Battiston llegaba hasta 2007, es decir, hasta la frontera misma de la gran crisis que sobrevino con la caída de Lehman Brothers y cuantificaba por primera vez la idea generalizada de que un puñado de compañías dominaban la economía mundial. La investigación permitía demostrar que 1318 trasnacionales poseían directa o indirectamente acciones de sociedades que representaban el 60 por ciento de los ingresos mundiales y que el núcleo duro de ese grupo eran unas 147 compañías que concentraban el 40 por ciento de los ingresos corporativos mundiales. Stefania Vitali está investigando lo que ha sucedido desde 2008 y maneja como hipótesis provisoria que esa concentración se ha intensificado. En diálogo con Cash, Vitali se refirió a su estudio y su impacto económico y político.

domingo, 13 de octubre de 2013

Credit Suisse: El 1% más rico posee el 46% de la riqueza global


Desde mediados del 2012 la cantidad de millonarios en el mundo ha crecido en casi dos millones y la mayoría provienen de Estados Unidos, según un informe elaborado por el banco Credit Suisse, Global Wealth Report 2012.

Nunca la humanidad ha tenido tanta riqueza ni ésta ha estado repartida de una forma tan desigual. La riqueza global ha subido un 68% en los últimos 10 años para llegar a un nuevo máximo histórico de 241 billones de dólares y Estados Unidos representa casi tres cuartos de ese incremento, según un informe elaborado por el banco Credit Suisse. Mientras que la riqueza global promedio por adulto sería así de 51.600 dólares, en la actualidad el 10% más acaudalado posee el 86% del total de los activos en el mundo. Y, es más, el 1% más adinerado posee el 46% de toda la riqueza.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

737 personas controlan el 80% de la economía mundial


Ivan Du Roy, Basta!

Un estudio de economistas y estadísticos, publicado en Suiza este Verano, da a conocer las conexiones entre las multinacionales mundiales. Revela que un pequeño grupo de actores económicos –sociedades financieras o grupos industriales– domina la gran mayoría del capital de decenas de miles de empresas en el mundo.

Su estudio, en la frontera de la economía, de las finanzas, de las matemáticas y de la estadísticas, es estremecedor. Tres jóvenes investigadores del Instituto federal de tecnología de Zurich examinaron las interacciones financieras entre las multinacionales del mundo entero. Su trabajo, “The network of global corporate control” (La red de control global de las trasnacionales) examina un panel de 43.000 empresas trasnacionales seleccionadas en la lista de la OCDE. Ellos dan a conocer las interconexiones financieras complejas entre estas “entidades” económicas: parte del capital retenido, inclusive en las filiales o en los holdings, participación cruzada, participación indirecta en el capital...

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