
Lo cierto es que ni la inyección de liquidez de 340 mil millones de dólares realizada entre lunes y martes de esta semana, ni el traspaso de Fannie Mae y Freddie Mac a manos del Estado, ni el rescate a AIG han logrado llevar la calma al enfermo de Wall Street. Al contrario, el mercado, intoxicado de tanto calmante y al igual que en las novelas de Agatha Christie solo parece preguntarse ¿quien será la próxima víctima?
El rescate de AIG no calmó al sistema financiero y el virus provocó otro desplome bursátil de gran magnitud. El Dow Jones cayó ayer 4,1% a su nivel más bajo desde 2001, arrastrado por la quiebra de Lehman Brothers, la venta de Merrill Lynch a Bank of America y el posible traspaso de Washigton Mutual a JP Morgan para evitar otra quiebra. El sistema financiero va cuesta abajo, y a estas alturas, con los frenos gastados.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario