Al igual que el Banco Central, que bajó fuertemente la proyección de crecimiento para Chile anunciada en diciembre, de entre un 5,5, a 6% , a 4% - 4,5%, la Fed ha hecho un recorte en su proyección para la economía estadounidense de entre 0,3 al 1,2%, por debajo del pronóstico de enero que iba entre el 1,3% y el 2%.
Esta es la razón de que Ben Bernanke haya salido al paso de las críticas de los banqueros europeos señalando que la baja de tasas ha sido una necesidad de la economía “y la Fed bajará nuevamente las tasas si la situación lo amerita.
Junto a bajar los pronósticos de crecimiento, Bernanke señaló que el desempleo aumentará y también lo hará la inflación, sin inmutarse al confirmar el ingreso a un período estanflacionario (de alta inflación con nulo o muy poco crecimiento) que puede tener consecuencias en el mediano y largo plazo.
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