martes, 29 de septiembre de 2009

Las 25 noticias más censuradas


Ernesto Carmona, Argenpress

Las 25 historias periodísticas más censuradas por la gran prensa de EEUU en 2008 y 2009 serán difundidas el 30 de septiembre en el informe “Censored 2010”, del Proyecto Censurado de la Universidad Sonoma State de California que publica en Nueva York la editorial Seven Stories.

Las 25 noticias “top” más sofocadas por la censura del imperio mediático incluyen temas candentes que trascienden a EEUU pero jamás son debatidos en los grandes medios, sino sólo por la prensa alternativa.

Por ejemplo:
•¿Cómo Wall Street domina al gobierno de EEUU?
•Lobbystas de EEUU compraron al Congreso
•Senadores y representantes se benefician con contratos del Pentágono
•Los grandes bancos que salvó el gobierno sacaron miles de millones a paraísos fiscales
•Los prestamistas beneficiados por el “Programa de Ayuda Urgente” gastan el dinero en campañas contra los trabajadores
•El control secreto de los debates presidenciales
•La Comisión Trilateral domina el gobierno de Obama
• Las reservas en dólares de los bancos centrales financian expansión militar imperial
•En crímenes de guerra en Gaza se usaron armas de EEUU
•Transnacionales lucran con la ocupación de Palestina
•En el Pentágono reina la corrupción
•Las escuelas de EEUU están hoy más segregadas que en los años 50
•Los “piratas” somalíes son pescadores que luchan contra el saqueo de la pesca de arrastre y la descarga de basura tóxica

“Censored 2010” ofrece también varias historias relacionadas con América Latina:
•La Amazonía occidental y sus pueblos indígenas están amenazados por la explotación petrolera
•Ecuador declaró ilegítima su deuda externa
•EEUU continúa reprimiendo a Haití
•Ecuador estableció los derechos constitucionales de la naturaleza
•Fiasco del Banco Mundial con el comercio de bonos anti-contaminación por carbono
•Activistas denunciaron al Foro Mundial del Agua como fraude corporativo

Mercado laboral en relación 6 a 1


Pese a las erráticas señales de que la economía reanuda el crecimiento, el mercado laboral se enfrenta a un escenario sombrío cuyas perspectivas siguen empeorando. El hecho da cuenta de la poca importancia que tiene para los medios y los líderes de opinión el tema del empleo, que siguen con mucha más atención los vaivenes de la bolsa, aunque tanto el Ibex como el Dow Jones se encuentran un 30% por debajo de las cotas alcanzadas el 2007.

En Estados Unidos, donde la actividad ha tocado fondo, la oferta de empleo es 6 veces superior a la demanda. Es decir, hay seis trabajadores disponibles para cada oferta de trabajo, en la peor relación de empleo en décadas. Y aunque el ritmo de despidos ha disminuído, muchas empresas siguen preocupadas por las perspectivas de crecimiento para los próximos meses. Esto demuestra que lejos del crecimiento, lo que se vive es un auténtico estancamiento, con 14,5 millones de desempleados oficiales en Estados Unidos, y más de 60 millones de personas sin empleo en el mundo.

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El nivel de empleo de Estados Unidos sigue siendo un dato relevante para la economía mundial. Más aún para los países exportadores. Con un 5% de la población del planeta, Estados Unidos llegó a consumir el 50% de la producción mundial, el doble de lo que producía. El consumo doméstico en Estados Unidos alcanzó en el período 2007-2008 el 80% del PIB, desde el 66% que tenía en el período 1985-1990.

Estados Unidos jugó y abusó de su condición de "consumidor de última instancia", al ser el fabricante de la moneda con la cual se transaba todo el comercio mundial, y al dejarse llevar por peligrosas políticas económicas desde Reagan en adelante. La decadencia que espera a Estados Unidos será larga y tediosa, como señala hoy el ex presidente de la Fed, Paul Volcker.
Me he referido a Paul Volcker en otros momentos y hay que decir que no tiene nada que ver con su sucesor en la Fed, Alan Greenspan. Reagan sacó a Volcker y puso a Greenspan en la Fed, porque el primero se negó a aplicar las finanzas de casino que a la larga hicieron sucumbir a Estados Unidos.
Para Volcker, la actual crisis "ha puesto de manifiesto la pérdida de liderazgo económico e intelectual de Estados Unidos". Más aún cuando aquellos países a los que EE.UU. debe cuatro billones de dólares "serán observadores pasivos de lo que se haga".
El asesor económico de Obama tiene la franqueza para afirmar que "la recuperación será más lenta de lo que se piensa", dado que costará mucho "bombear el consumo al nivel previo a la crisis". De ahí que mientras el empleo de Estados Unidos no comience un sólido despegue, no se puede hablar de recuperación. El resto es solo un espejismo.

Lecturas


Revolución keynesiana y contrarrevolución neoliberal, Eric Toussaint, CADTM
La era del exceso energético o la vida después de la era del petróleo, Michael T. Klare. Sin Permiso
Naomi Klein conversa con Michael Moore sobre su última película, Naomi Klein, Michael Moore
El Elefante y la pulga, Charles Handy, Ramón Morata. Artículos claves
Un día cualquiera en la oficina, José Amorós. Retales de Economía
Reflexiones de Fidel Castro: Pittsburgh y la Cumbre de Margarita
Noam Chomsky: América Latina es el lugar más estimulante del mundo, David Brooks.
Honduras: ¿el principio del fin?, Atilio Boron

MOP recibe proyecto privado para construir tren rápido a V Región, Diario Financiero

Mal clima para el medio ambiente

Economist Intelligence Unit, La Jornada

En Occidente se habla mucho de que los países pobres contribuyen al cambio climático, aunque la escala de esa contribución sigue causando sorpresa. Los países pobres y de medianos ingresos ya representan poco más de la mitad de todas las emisiones de carbón; Brasil produce más CO2 por cabeza que toda Alemania. Las emisiones durante la vida útil planeada de las plantas de energía de esos países igualarían toda la contaminación generada por la industria en el planeta de 1850 a la fecha.

Se tiene menos conciencia, en cambio, de que el calentamiento global hace mucho más daño a esos países pobres del que ellos le causan al clima. En un informe de 2006, Nicholas Stern calculó que un incremento de dos grados en la temperatura global cuesta alrededor de uno por ciento del PIB mundial. Pero el Banco Mundial, en su nuevo Informe del desarrollo mundial, ahora dice que el costo para África representaría más bien 4% de su PIB, y para India, 5%. Aun si los costos ambientales se distribuyeran al parejo entre todas las personas de la Tierra, los países en desarrollo soportarían 80% de la carga (porque representan 80% de la población mundial). Ya en este momento soportan una carga mayor, pese a que las huellas de carbón de sus ciudadanos son mucho más pequeñas.

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Conforme se acerca la cumbre de Copenhague sobre el cambio climático, que será en diciembre, las naciones pobres expresan alarma por el lento avance de las negociaciones para remplazar el Protocolo de Kyoto.

Calcular el costo del calentamiento global es difícil porque nadie sabe en realidad cuánto atribuir al cambio climático y cuánto a otros factores. Pero una indicación de sus costos crecientes es el número de personas afectadas por desastres naturales en el planeta. En 1981-85, menos de 500 millones de personas necesitaron ayuda por desastres; en 2001-05, el número llegó a mil 500 millones, incluido 4% de la población de las naciones más pobres y 7% de la de los países de medianos ingresos.

En total, según la Organización Mundial de la Salud, el cambio climático causó en 2000 una pérdida de 5.5 millones de años de vida ajustados a discapacidad (una medida de daño a la salud humana), la mayoría en África y Asia. Los cálculos del centro suizo de análisis Foro Humanitario Global, y los de un estudio de la revista científica Comparative Quantification of Health Risks, ubican en 150 mil las muertes adicionales atribuibles al cambio climático cada año. El daño indirecto, en términos de impacto en reservas de agua, cosechas y enfermedades, es mucho mayor.

Los pobres son más vulnerables que los ricos por varias razones. Viviendas precarias, malas condiciones de salud y atención médica inadecuada significan que los desastres naturales de todo tipo los lesionan más. Cuando el huracán Mitch pasó por Honduras, en 1998, los hogares pobres perdieron 15-20% de sus bienes; los ricos, sólo 3%.

El calentamiento global agrava esta situación. También eleva las probabilidades de contraer las enfermedades peligrosas que más prevalecen en países pobres. En muchos lugares se han construido ciudades apenas arriba de la llamada "línea de la malaria", más allá de la cual los mosquitos portadores del mal no pueden sobrevivir (Nairobi es un ejemplo). El aumento de temperatura permite que los insectos se muevan hacia zonas antes libres de ellos y propaguen una enfermedad que ya es la principal causa de muerte en África. Hacia 2030 el cambio climático podría exponer a 90 millones de personas más a la malaria, tan sólo en África. Los brotes de meningitis en ese continente se relacionan fuertemente con la sequía. Es probable que ambos aumenten. Se prevé que las diarreas se elevarán 5% hacia 2020 en las naciones pobres a causa del cambio climático. El dengue se ha expandido: su incidencia se duplicó en partes de África en 1995-97 y en 2005-07. Se calcula que 60% de la población mundial estará expuesta a esa enfermedad hacia 2070.

Los países pobres son particularmente propensos a inundaciones. Diez de las 15 mayores ciudades del mundo en desarrollo se ubican en zonas costeras vulnerables a la elevación del nivel de los mares o a las marejadas. Entre ellas se encuentran Bombay, Shanghai y El Cairo. En el sur y el este de Asia las cuencas de los ríos han sido asiento de enormes números de personas y gran actividad económica. El cambio climático acaba con las medidas sociales y de otro tipo que antes permitían a naciones y personas hacer frente a las inundaciones. Los presupuestos nacionales apenas si pueden sufragar el costo de mejorar las defensas. Holanda también se ve afectada y gasta 100 dólares por persona al año en protección contra inundaciones. En Bangladesh esa suma es la cuarta parte del ingreso anual per cápita.

La mayor vulnerabilidad es que el aumento de temperatura afecta gravemente las principales actividades económicas del mundo en desarrollo, como la agricultura y el turismo. También parece acelerar el ciclo hidrológico de la Tierra, lo cual causa tanto las sequías como las inundaciones (caen más lluvias en periodos más cortos, con pausas más largas entre ellos). Además, al derretir los glaciares, reduce la capacidad de reserva de la naturaleza. Dos terceras partes de la reserva de agua potable del mundo están en los glaciares.

Por otro lado, las variedades de semillas de alto rendimiento y resistentes a plagas inventadas en la década de 1960 se diseñaron para climas estables. Las semillas naturales resisten mejor las variaciones de temperatura, pero se usan menos. Restaurar su uso significa menos alimento.

Negociación en Copenhague

Si todos estos problemas tienen alguna ventaja, es que dan a países ricos y pobres por igual un interés mayor en mitigar el impacto del cambio climático. Como subraya el Banco Mundial, la política sobre el cambio climático ya no es sólo una simple elección entre crecimiento y bienestar ecológico.

En principio ese giro debería hacer más probable llegar a un acuerdo en Copenhague, pero persisten dos problemas importantes. Uno, los países pobres quieren grandes sumas de dinero. Limitar el calentamiento a 2°C, según cálculos del Banco Mundial, costaría entre 140 mil y 675 mil mdd al año en países en desarrollo. Los 75 mil mdd que costaría adaptarse al calentamiento global (en oposición a detenerlo) superan con mucho los mil millones anuales disponibles para ellos.

Dos, los países pobres ven un acuerdo sobre cambio climático en términos diferentes. Para los ricos el problema es ambiental: los gases de efecto invernadero se acumulan en la atmósfera y se deben reducir, de preferencia por medio de las metas de compromiso recomendadas por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático. Los países pobres lo ven como un problema de justicia y de historia: los países ricos son responsables de dos terceras partes de las emisiones de carbono enviadas a la atmósfera de 1850 a la fecha; reducirlas ahora en términos absolutos perpetuaría la injusticia. Por tanto, creen que la reducción debe ser per cápita, no absoluta.

Además, las metas fijadas a escala nacional tendrán poco efecto en los países pobres donde la administración pública funciona mal, por lo cual existe también desacuerdo en cuanto a las condiciones adosadas a cualquier dinero que se aporte para mitigar el cambio climático o adaptarse a él. Para los ricos es una especie de ayuda, destinada a proyectos específicos con metas cuantificables y con condiciones estrictas. Para los pobres es una compensación incondicional por un problema que ellos no causaron.

El costo del cambio climático da a las naciones en desarrollo un gran interés en un acuerdo en Copenhague. Pero cómo sea ese acuerdo, y con cuánto vigor lo impulsarán, es una cuestión por completo diferente.

Fuente: EIU

Traducción de texto: Jorge Anaya

Cepal entrega cinco recetas para mejorar políticas en competitividad

Cinco recetas para mejorar los niveles de innovación y tecnología en América Latina entregó ayer la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Barcena, durante su exposición en el III Foro de Competitividad realizado en el Hotel Sheraton y que reunió a autoridades públicas, empresarios y expertos del más alto nivel de los 34 países de la región.

A juicio de la experta, en el continente ha habido avances, pero "estos han sido insuficientes". Frente a este escenario, enfatizó áreas de acción específicas.


Una, el desarrollo de políticas activas con incentivos, apoyo a las inversiones y mejorar las alianzas público-privadas.

En segundo lugar, la ex secretaria general adjunta de gestión en la Sede de las Naciones Unidas en Nueva York planteó la necesidad de trabajar en sistemas nacionales y regionales para que las redes de competitividad interactúen.

Barcena dijo que es clave el fortalecimiento de la cooperación entre los países de la región, la formación de gestores de la innovación y una mirada de largo plazo “en pos de la convergencia productiva y la creación de empleo en el contexto de la igualdad”.

En el contexto de una red latinoamericana, Barcena adelantó que en marzo de 2010 la Cepal inaugurará la Escuela de Alta Formación para gestores de políticas de ciencia y tecnología de la Cepal. Dicha instancia, dijo la especialista, será fundamental para “apostar con firmeza en el capital humano”.

Respecto de las medidas que se requiere tomar a nivel local para avanzar en competitividad, sostuvo que "en Chile debe haber un aumento sustantivo del gasto público orientado a ciencia, tecnología e investigación".

Además, la secretaria ejecutiva de la Cepal afirmó que "ojalá se puedan establecer fondos compartidos entre los sectores público y privado, por ejemplo programas donde el Estado ponga uno y las empresas dos".

Finalmente, Barcena señaló que “también es importante la política de patentes, eso es central para que haya innovación, pues debe haber claridad, ya sea para copiar o desarrollar una nueva patente”.

lunes, 28 de septiembre de 2009

Memorias de la Administración Carter, o cómo se entró en la edad obscura de la ciencia económica

Paul Krugman, Sin Permiso

Una de las novelas de John Updike se titulaba Memorias de la Administración Ford. Huelga decir que no versaba sobre Gerald Ford; iba de sexo, porque Updike recordaba los años de Ford como la era dorada de enredos amorosos extramaritales. Análogamente, este post no se refiera a Jimmy Carter, sino sobre teoría macroeconómica. (Lo siento.)

Fue a finales de los setenta cuando la teoría macroeconómica experimentó su gran proceso de división. Es un período grabado en la memoria de quienes éramos entonces jóvenes economistas en busca de un sendero propio. Sin embargo, no he visto nunca una explicación clara de lo que pasó en aquellos momentos. He aquí, pues, un esbozo de explicación que espero ver completada algún día por algún historiador serio de las ideas.

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Tal como yo lo recuerdo, todo empezó con el volumen de Phelps: Microeconomic Foundations of Employment and Inflation Theory. El asunto que esa colección de ensayos trataba de resolver está lindamente resumida aquí. Keynes (y, para lo que aquí interesa, Milton Friedman) sostenían que un descenso de la demanda agregada debido, pongamos por caso, a una caída en la oferta de dinero traería consigo una caída del empleo y de la producción; y la experiencia demostró que llevaban razón. Sin embargo, la teoría microeconómica estándar implica que la producción tendría que responder sólo a cambios en los precios relativos, no a cambios en el nivel general de precios, lo que, a su vez, implica que el dinero debería ser “neutral”: un 20% de caída en la oferta de dinero debería traer consigo un 20% de caída en el nivel general de precios, pero no alteraciones en el volumen de producción o en el empleo.

Phelps y otros se proponían explicar en términos de información imperfecta por qué la economía tiene una apariencia tan keynesiana: los trabajadores y las empresas responden a los cambios en el nivel de precios como si se tratara de un cambio en los precios relativos, porque, al comienzo, no pueden percatarse de la diferencia. Con el tiempo, no obstante, se percatan de su error, de modo, por ejemplo, que un incremento de la tasa de inflación comenzará por reducir el desempleo, pero no con una base sostenida, porque, al final, la inflación se reflejará en las expectativas de los agentes. Así pues, la nueva teoría predecía la aparición de estanflación, una predicción que se vio oportunamente confirmada.

Mas ¿de dónde vienen las expectativas? Robert Lucas procedió al maridaje de los modelos phelpianos con las expectativas racionales, la teoría según de la cual los agentes económicas se sirven de todo tipo de información disponible para hacer predicciones. Y eso llevó a una asombrosa conclusión: las políticas que la gente puede anticipar no tienen el menor efecto sobre el nivel de empleo. Sólo cuentan los cambios por sorpresa en, digamos, el nivel de oferta monetaria, lo que significa que no puedes servirte de políticas monetarias o de políticas fiscales para estabilizar la economía.

La teoría de Lucas tomó al asalto a los recintos de la profesión económica. No porque aportara la menor prueba sólida, sino por su astuta audacia, porque se servía de unos lindos razonamientos matemáticos, porque permitía a los macroeconomistas abandonarse al teórico neoclásico que todos llevaban dentro.

Pero ya a finales de los setenta resultaba claro que las expectativas o anticipaciones racionales no funcionaban a escala macro. ¿Por qué? Porque la gente tiene demasiada información.

Piénsese en el asunto del desempleo que antes mencioné. Lo que ocurre aquí es que una contracción en la oferta monetaria puede generar una recesión, ¡pero sólo mientras la gente no se percate de que hay una recesión! Ya ven ustedes, si la gente sabe que hay una recesión, sabe también que los precios bajo que se le ofrecen reflejan una demanda general baja, no una demanda específicamente baja para sus productos.

En los modelos del tipo de los de Lucas, se parte del supuesto de que la gente observa los precios a los que se enfrenta y es capaz de distinguir óptimamente la “señal” del “ruido”. Los modelos se desploman, sin embargo, así que permites que las gentes tengan acceso a cualquier tipo de información (observando, pongamos por caso, los tipos de interés, o leyendo periódicos). Y la realidad, huelga decirlo, es que las recesiones persisten hasta mucho después de que todo el mundo sepa que hay una recesión, es decir, hasta mucho después de que se haya desvanecido la confusión exigida por los modelos lucasianos.

Recuerdo un seminario, celebrado, creo, en 1980, en el que Robert Barro presentaba un modelo de ciclos económicos basado en las expectativas racionales. Alguien le preguntó cómo podía reconciliar ese modelo con la grave recesión que estaba en curso mientras él hablaba. “No me interesa el último residual”, replicó Barro.

Pero hacia 1980 o 1981 era ya bastante claro para todo el mundo que el proyecto de Lucas –el intento de explicar el comportamiento manifiestamente keynesiano de la economía en puros términos de información imperfecta— había fracasado. ¿Qué harían los teóricos de la macroeconomía?

Pues se dividieron. Una facción, en efecto, dijo: “Vale; no podemos explicar lo que creemos ver en términos de maximización total. Pues supondremos la maximización tiene ciertos límites: costes del cambio de precios, racionalidad limitada, o cualquier cosa por el estilo”. Esa facción terminó por ser conocida como Nuevo keynesianismo, teoría económica de agua salada. (1)

La otra facción, en efecto, dijo: “Vale: no podemos explicar lo que creemos ver en términos de maximización toral. Pues será porque interpretamos mal los datos: cosas como los cambios en la oferta monetaria no pueden traer consigo recesiones, porque la teoría dice que eso es imposible”. Esa facción terminó por ser conocida como la escuela de los ciclos económicos reales, teoría económica de agua dulce. (2)

Pero la cosa es así: llegados a este punto, la escuela de agua dulce no se acuerda ya de nada de esto, en buena medida porque purgaron de sus centros a todo lo que oliera a keynesiano y aun a monetarista. Todo lo que saben del keynesianismo es que fue “refutado", y que nada que proceda de él (ni siquiera los modelos neokeynesianos con expectativas racionales, un enfoque que, como dice, Greg Mankiw, “ofrece un esquema conceptual para la intervención pública en la economía, por ejemplo, una política monetaria o fiscal anticíclica”) merece siquiera ser escuchado.

Y así se ha llegado adonde se ha llegado.

NOTAS T. : (1) En referencia a la ciencia económica cultivada en las instituciones académicas ubicadas en el Este y en el Oeste de los EEUU, es decir, en las costas atlántica y pacífica (Harvard, Berkely, Princenton, Stanford, etc.). (2) En referencia a la ciencia económica cultivada en las instituciones académicas ubicadas en el centro de los EEUU, en áreas de grandes lagos (Chicago, Rochester, Minessota, etc.).

Bancos europeos acumulan pérdidas por 580 mil millones de dólares


Suena siniestro, pero la crisis financiera no ha terminado. Hasta 22 grandes europeos pueden perder hasta 400 mil millones de euros (580 mil millones de dólares) en préstamos durante este año y el próximo, según las conclusiones de las pruebas de estrés llevadas a cabo por los reguladores de la UE.

Citando a funcionarios que han trabajado en las conclusiones de las pruebas de tensión, el International Herald Tribune señaló el sábado que: “Veintidós de los grandes bancos en Europa pueden haber acumulado pérdidas de crédito por cerca de 400 mil millones de euros para este año y el próximo”.

Las pruebas de los bancos de Europa se llevaron a cabo por el Comité de Supervisores Bancarios Europeos o CEB y serán dadas a conocer entre el jueves y el viernes de esta semana en Gotemburgo, Suecia. Los ministros de Finanzas de la UE tienen previsto publicar el estado de la salud de la banca, sobre la base de los resultados de estas pruebas. También tienen previsto iniciar una prueba de esfuerzo para las compañías de seguros. Según funcionarios de la UE, las pruebas de estrés para las aseguradoras europeas se llevarán a cabo en la sede de Frankfurt del Comité de seguros y pensiones de jubilación.

domingo, 27 de septiembre de 2009

Lecturas

Reforma o ruina, Paul Krugman
El impetuoso retorno de la ideología liberal en los años setenta, Eric Toussaint
La estatización de la banca: una discusión necesaria e inmediata, Paul Walder
Chile y Bachelet, Finanzas Públicas


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¿Top ten en felicidad?

La encuesta Latinobarómetro, realizada en 18 países de América Latina y a más de 500 millones de habitantes, reveló el grado de felicidad de los chilenos en comparación con el resto de las naciones de la región en medio de la crisis económica actual.

Chile ocupa el décimo lugar de la lista, quedando justo en la mitad de los países más felices. El primero en ocupar el ranking latinoamericano es Brasil, seguido de Guatemala, Venezuela, Argentina y México.


Bolivia y Perú están más abajo y presentan un menor grado de satisfacción, al igual que Panamá y Paraguay, entre otros.

La encuesta de Latinobarómetro ha demostrado un incremento sostenido del grado de felicidad de los países latinoamericanos.

Pero, ¿qué es realmente lo que condiciona la felicidad? Según el sondeo, factores externos como el trabajo, la pareja, la estabilidad económica actual –sobre todo en medio de la crisis-, los bienes e incluso el clima de cada nación encuestada, condicionan la alegría de quienes habitan el continente.

sábado, 26 de septiembre de 2009

Mafias farmacéuticas


Ignacio Ramonet, Le Monde Diplomatic

Los grandes grupos farmacéuticos recurren a toda suerte de juegos sucios para impedir la llegada al mercado de medicinas más eficaces y sobre todo para descalificar los medicamentos genéricos mucho más baratos. La ofensiva de los monopolios farmacéutico-industriales no tiene fronteras. La salud en juego.

Muy pocos medios de comunicación lo han comentado. La opinión pública no ha sido alertada. Y sin embargo, las preocupantes conclusiones del Informe final (1), publicado por la Comisión Europea el pasado 8 de julio, sobre los abusos en materia de competencia en el sector farmacéutico merecen ser conocidas por los ciudadanos y ampliamente difundidas.


¿Qué dice ese informe? En síntesis: que, en el comercio de los medicamentos, la competencia no está funcionando, y que los grandes grupos farmacéuticos recurren a toda suerte de juegos sucios para impedir la llegada al mercado de medicinas más eficaces y sobre todo para descalificar los medicamentos genéricos mucho más baratos. Consecuencia: el retraso del acceso del consumidor a los genéricos se traduce en importantes pérdidas financieras no sólo para los propios pacientes sino para la Seguridad Social a cargo del Estado (o sea de los contribuyentes). Esto, además, ofrece argumentos a los defensores de la privatización de los Sistemas Públicos de Salud, acusados de ser fosos de déficits en el presupuesto de los Estados.

Los genéricos son medicamentos idénticos, en cuanto a principios activos, dosificación, forma farmacéutica, seguridad y eficacia, a los medicamentos originales producidos en exclusividad por los grandes monopolios farmacéuticos. El periodo de exclusividad, que se inicia desde el momento en que el producto es puesto a la venta, vence a los diez años; pero la protección de la patente del fármaco original dura veinte años. Entonces es cuando otros fabricantes tienen derecho a producir los genéricos que cuestan un 40% más baratos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la mayoría de los Gobiernos recomiendan el uso de genéricos porque, por su menor coste, favorecen el acceso equitativo a la salud de las poblaciones expuestas a enfermedades evitables (2).

El objetivo de las grandes marcas farmacéuticas consiste, por consiguiente, en retrasar por todos los medios posibles la fecha de vencimiento del periodo de protección de la patente; y se las arreglan para patentar añadidos superfluos del producto (un polimorfo, una forma cristalina, etc.) y extender así, artificialmente, la duración de su control del medicamento.

El mercado mundial de los medicamentos representa unos 700.000 millones de euros (3); y una docena de empresas gigantes, entre ellas las llamadas "Big Pharma" -Bayer, GlaxoSmithKline (GSK), Merck, Novartis, Pfizer, Roche, Sanofi-Aventis-, controlan la mitad de ese mercado. Sus beneficios son superiores a los obtenidos por los poderosos grupos del complejo militar-industrial. Por cada euro invertido en la fabricación de un medicamento de marca, los monopolios ganan mil en el mercado (4). Y tres de esas firmas, GSK, Novartis y Sanofi, se disponen a ganar miles de millones de euros más en los próximos meses gracias a las ventas masivas de la vacuna contra el virus A(H1N1) de la nueva gripe (5).

Esas gigantescas masas de dinero otorgan a las "Big Pharma" una potencia financiera absolutamente colosal. Que usan en particular para arruinar, mediante múltiples juicios millonarios ante los tribunales, a los modestos fabricantes de genéricos. Sus innumerables lobbies hostigan también permanentemente a la Oficina Europea de Patentes (OEP), cuya sede se halla en Múnich, para retrasar la concesión de autorizaciones de entrada en el mercado a los genéricos. Asimismo lanzan campañas engañosas sobre estos fármacos bioequivalentes y asustan a los pacientes. El resultado es que, según el reciente Informe publicado por la Comisión Europea, los ciudadanos han tenido que esperar, por término medio, siete meses más de lo normal para acceder a los genéricos, lo cual se ha traducido en los últimos cinco años en un sobregasto innecesario de cerca de 3.000 millones de euros para los consumidores y en un 20% de aumento para los Sistemas Públicos de Salud.

La ofensiva de los monopolios farmacéutico-industriales no tiene fronteras. También estarían implicados en el reciente golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya en Honduras, país que importa todas sus medicinas, producidas fundamentalmente por las "Big Pharma". Desde que Honduras ingresó en el ALBA (Alianza Bolivariana de los Pueblos de América), en agosto de 2008, Manuel Zelaya negociaba un acuerdo comercial con La Habana para importar genéricos cubanos, con el propósito de reducir los gastos de funcionamiento de los hospitales públicos hondureños. Además, en la Cumbre del 24 de junio pasado, los Presidentes del ALBA se comprometieron a "revisar la doctrina sobre la propiedad industrial", o sea, la intangibilidad de las patentes en materia de medicamentos. Estos dos proyectos, que amenazaban directamente sus intereses, impulsaron a los grupos farmacéuticos transnacionales a apoyar con fuerza el movimiento golpista que derrocaría a Zelaya el 28 de junio último (6).

Asimismo, Barack Obama, deseoso de reformar el sistema de salud de Estados Unidos que deja sin cobertura médica a 47 millones de ciudadanos, está afrontando las iras del complejo farmacéutico-industrial. Aquí, las sumas en juego son gigantescas (los gastos de salud representan el equivalente del 18% del PIB) y las controla un vigoroso lobby de intereses privados que reúne, además de las "Big Pharma", a las grandes compañías de seguros y a todo el sector de las clínicas y de los hospitales privados. Ninguno de estos actores quiere perder sus opulentos privilegios. Por eso, apoyándose en los grandes medios de comunicación más conservadores y en el Partido Republicano, están gastando decenas de millones de dólares en campañas de desinformación y de calumnias contra la necesaria reforma del sistema de salud.

Es una batalla crucial. Y sería dramático que las mafias farmacéuticas la ganasen. Porque redoblarían entonces los esfuerzos para atacar, en Europa y en el resto del mundo, el despliegue de los medicamentos genéricos y la esperanza de unos sistemas de salud menos costosos y más solidarios.

Referencias
(1) http://ec.europa.eu/comm/competition/sectors/pharmaceuticals/inquiry/index.html
(2) El 90% de los gastos de la gran industria farmacéutica para el desarrollo de nuevos fármacos está destinado a enfermedades que sólo padece el 10% de la población mundial.
(3) Intercontinental Marketing Services (IMS) Health, 19 de marzo de 2009.
(4) Carlos Machado, "La mafia farmacéutica. Peor el remedio que la enfermedad", 5 de marzo de 2007 (www.ecoportal.net/content/view/full/67184).
(5) Léase, Ignacio Ramonet, "Los culpables de la gripe porcina", Le Monde diplomatique en español , junio de 2009.
(6) Observatorio Social Centroamericano, 29 de junio de 2009

Para más información ver: Resumen analítico del Informe de investigación sectorial sobre el sector farmacéutico, e Investigación de la Unión Europea sobre competencia en el sector farmacéutico

Fuente: Le Monde Diplomatique - Septiembre 2009. Numero 167

Lecturas

- Todos los bancos cierran el grifo... excepto los chinos, Marc Garrigasait, Investors Conundrum
- El G-20 se atasca en la reforma financiera, Alejadro Bolaños, El País
- Wall Street, a lomos del 'oso', El Economista
- La necesidad de una reforma fiscal redistributiva en el Reino de España. Entrevista, Daniel Raventós, Sin Permiso
- Obama: "Hemos sacado al mundo del borde del abismo", El País
- España: El Gobierno aumenta el IVA general al 18% y suprime la deducción de los 400 euros, El País
- Las cuatro cosas que hay que saber sobre el rompecabezas global, El Cronista


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El G-20 cree que le ganó a la crisis


Con una propuesta de Estados Unidos para reducir su enorme déficit, aumentar su tasa de ahorro y reorientar su economía financiera, terminó la cumbre de Pittsburgh. Habrá que verlo. Lo cierto es que el plan para reorientar una economía mundial que se sacude en las catacumbas, necesita más que bonitas palabras al cierre. Puede ver aquí el Comunicado final de la Cumbre.

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viernes, 25 de septiembre de 2009

Orlando Caputo: "Las privatizaciones y los TLC volvieron a la economía más vulnerable"

Entrevista realizada a Orlando Caputo por Sebastian Brulez

Señalada por los defensores del libre mercado como el modelo a seguir para el continente, la economía chilena ha sido sin embargo una de las primeras en sufrir los efectos de la crisis mundial; poniendo así al desnudo el mito de la “izquierda responsable y progresista” que estadounidenses y europeos pretenden imponer frente al giro de América Latina hacia opciones transformadoras.

Para el economista chileno Orlando Caputo, la apertura económica y los TLC hicieron que la economía del país andino fuera más afectada por la crisis. Caputo es miembro del grupo de trabajo de Economía Mundial, Corporaciones Transnacionales y Economías Nacionales del Clacso (Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales). Durante el gobierno del presidente Salvador Allende, se desempeñó como gerente general de Codelco (Corporación Nacional del Cobre). Después del golpe militar se exilió durante 17 años a México, donde impartió clases en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)

Los ideólogos del capitalismo presentan la economía chilena como un ejemplo para nuestro continente. ¿Qué impactos ha tenido la crisis mundial sobre ella?

La economía chilena presentaba un agotamiento relativo previo a la crisis actual. De hecho, entre las grandes economías de América Latina, Chile y México han sido las de menor crecimiento en los últimos años. Además, la apertura de la economía chilena y los Tratados de Libre Comercio (TLC) permiten que los impactos de la crisis se transmitan en forma acelerada hacia Chile.

Si medimos las variaciones del Producto Interior Bruto (PIB) en Chile como en los países desarrollados (es decir, con relación al trimestre inmediatamente anterior), la economía chilena entró en recesión a partir del tercer trimestre de 2008, con disminuciones de la producción en el tercer y cuarto trimestres. Estudios de Merrill Lynch (consultora norteamericana) no sólo confirman que Chile entró en recesión, ¡sino que fue el primer país de la región en esta situación!

En la misma época, los Fondos de Pensiones de los trabajadores (acumulados por décadas e invertidos en gran parte en las Bolsas de Chile y de otros países, particularmente Estados Unidos) habían perdido cerca de 37 mil millones de dólares con relación al valor de diciembre de 2007. Esto equivale a una pérdida de 33,3% del valor global de estos fondos.

Además de esto, las pérdidas anualizadas por la caída del precio del cobre en el cuarto trimestre de 2008 se estiman en 25 mil millones de dólares. El cobre, principal riqueza básica del país, representa más del 60% de las exportaciones globales chilenas en los últimos años.

La suma de ambas pérdidas equivale a cerca del 50 por ciento del PIB chileno y a cerca de seis veces el PIB anual de Bolivia. El impacto en la sociedad chilena y en los indicadores macroeconómicos (consumo, inversión y producción) fueron muy drásticos y el desempleo creció aceleradamente. Todo esto está relacionado con los elementos centrales del neoliberalismo y de los TLC: la flexibilidad laboral y las reformas a la legislación laboral; la libre circulación del dinero y del capital; la privatización y desnacionalización del cobre, así como la transformación del sistema previsional.

En 1971, el gobierno del presidente Allende había nacionalizado el cobre, reinvirtiendo estos recursos en el desarrollo social y productivo del país. ¿Qué queda hoy de esa medida?

Bajo la política de nacionalización impulsada por Salvador Allende, el Estado (a través de Coldelco) controlaba cerca del 100% de la producción de cobre. Hoy en día esta cifra alcanza apenas el 26,2%. Con la dictadura se restauraron las bases del capitalismo y el incremento de la tasa de ganancias. Esto se hizo, entre otros aspectos, a través del aumento de la explotación de los trabajadores; la privatización de empresas y el desarrollo del capitalismo en el campo.

Por otra parte, el neoliberalismo ha profundizado el carácter primario exportador de la economía chilena y aumentó su dependencia y vulnerabilidad. En varios documentos hemos denunciado la desnacionalización del cobre, los grandes beneficios y remesas de las mineras mundiales en Chile. Hemos tenido presente que la desnacionalización del cobre es anticonstitucional, ya que la Constitución chilena señala categóricamente que “el Estado tiene el dominio absoluto, exclusivo, inalienable e imprescriptible de todas las minas”.

¿Cómo explica los bajos precios del cobre y qué impacto tienen sobre la economía chilena?

De 1996 a 2003 se produjo una fuerte disminución del precio del cobre por la sobreproducción mundial creada desde Chile por las transnacionales mineras. Con los precios bajos, abastecen a sus empresas asociadas en otros países que funden, refinan y manufacturan el cobre. Por otra parte, las industrias de la construcción y de la automotriz usan intensamente el cobre a escala mundial. Ambas, claves en la crisis actual junto a la disminución de la demanda de China, provocaron una caída importante de los precios.

Las mineras se han beneficiado con períodos de bajos precios causando graves daños a Chile y son las más beneficiadas con los períodos de precios elevados. Éstos se incrementaron a partir de septiembre de 2003, por el ajuste de la oferta y por el incremento adicional de la demanda China. El impacto en las remesas de ganancias e intereses de las inversiones extranjeras se manifestó de inmediato con fuertes incrementos de ellas. Las remesas totales en 2006 fueron superiores a 25.000 millones de dólares, de los cuales se estima que 20.000 millones han sido remesados por las grandes mineras mundiales que controlan el cobre chileno. Estas ganancias han llegado a ser tan elevadas que superan el valor de las inversiones extranjeras realizadas en la minería chilena desde 1974 a 2006, que fueron 19.900 millones de dólares.
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Entrevista realizada por Sebastian Brulez, publicada en Rebelión

jueves, 24 de septiembre de 2009

FMI: el desempleo provocará más inestabilidad social y hasta guerra

El director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, advirtió que la inestabilidad social se incrementará a medida que crezcan el desempleo y las dificultades en países aún golpeados por la crisis económica global, situación que podría llegar incluso a la guerra.

En un discurso en Nueva York, que coincidió con el comienzo de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el jefe del FMI dijo que si bien la economía mundial podría estar en recuperación, la crisis apenas comienza para muchas personas que están a punto de perder sus empleos. "El desempleo bien podría continuar subiendo el próximo año, incluso cuando la economía repunte", dijo Strauss-Kahn.


"En muchos países, particularmente los que no tienen redes de seguridad social adecuadas, la pobreza persistirá. Y con esto llegan riesgos a la estabilidad social".

En la Cumbre de Liderazgo Creativo Global de la ONU, sostuvo que "la estabilidad económica y la paz deben ir de la mano", y agregó que si se pierde una, probablemente se pierda la otra.

El jefe del FMI consideró que las condiciones financieras globales han mejorado, y el Fondo pronostica una recuperación global en la primera parte de 2010, pero advirtió que los mercados laborales podrían tardar en recuperarse, ya que en general las empresas tienden a responder lentamente a las reactivaciones económicas.

"Podemos ver la luz al final del túnel, aunque la crisis de ninguna manera haya terminado", expresó. "Pero incluso si el crecimiento se recupera, podría pasar algún tiempo para que el empleo le siga", añadió.

Es mucho lo que está en juego en las naciones más pobres, que no sólo fueron golpeadas por la recesión global y por la contracción del comercio mundial, sino también por un alza de los precios de los alimentos, subrayó Strauss-Kahn.

Naciones Unidas y el Banco Mundial estiman que hasta 90 millones de personas en los países en desarrollo podrían caer en la pobreza debido a la crisis.

"En muchas áreas del mundo, lo que está en juego no es sólo un aumento del desempleo o una caída del poder adquisitivo, sino además la vida y la muerte en sí mismas. La marginación económica y la indigencia podrían llevar a la inestabilidad social y política, o a un quiebre de la democracia. Podríamos ver la guerra. Eso es lo que debemos evitar", conminó.


Agregó que la cooperación entre las naciones desarrolladas y en desarrollo durante la crisis había evitado otra gran depresión, e instó a los líderes políticos a mantener esos esfuerzos para asegurar una recuperación duradera. Strauss-Kahn participa en la cumbre de la G20 en Pittsburgh, donde se discuten las últimas propuestas sobre la recuperación de la economía global. Estados Unidos propone un nuevo equilibrio, y pide a los países exportadores que consuman más, y a los deudores, como el propio Estados Unidos, que impulsen los ahorros. Pero se le deja al FMI descubrir el modo de lograr ese objetivo.

El Fondo ha proyectado una recuperación global durante el primer semestre de 2010. No obstante, Strauss-Kahn advirtió que los mercados laborales podrían tomar más tiempo en ponerse a la par, ya que las contrataciones generalmente tienden a responder con lentitud a los giros económicos. Como resultado, los países sin redes de seguridad social adecuadas soportarán más pobreza y se arriesgarán al incremento de la inestabilidad social.

La Organización Internacional del Trabajo dijo en mayo que prevé que la cifra de desempleados en el mundo pueda elevarse a un récord hasta de 241 millones de personas, es decir, de 39 a 61 millones más que en 2007.

vía Reuters la jornada

Honduras sin combustible ni alimentos



Aunque esta es la versión oficial del gobierno, es muy útil consultar este raportaje de la BBC: http://www.youtube.com/watch?v=p7rCT80vvQQ

Esto saldra en la pagina al pulsar leer mas

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