Una baja participación de los votantes tuvieron las elecciones del domingo en la Unión Europea. La participación fue del 43,1 por ciento y sólo un poco más alta que las elecciones de 2009. Las mayores participaciones de los votantes fueron en Luxemburgo y Bélgica. En Eslovaquia, sin embargo, sólo el 13 por ciento de los votantes emitieron su voto. Los estados de la Europa del Este tuvieron una baja participación en estas elecciones dando cuenta que firmar parte de la UE es más una carga que un alivio. Esto confirma que la extensión de Europa hacia el Este ha obedecido a intereses más geopolíticos que sociales o culturales.