México será el país más golpeado por la crisis

México, lindo y querido, será el país más golpeado de Latinoamérica por la recesión que afecta a EEUU al ser el más atrasado en la creación de sus vínculos comerciales con China. La economía mexicana tendrá un crecimiento de apenas 2% para este año, 2 puntos menos que el estimado en octubre del año pasado por el FMI cuando se pronosticó en 4%. La fuerte dependencia de México respecto de la economía estadounidense le impondrá un lastre que ni siquiera el aumento de su producción de petróleo (México es el quinto productor mundial de crudo) podrá aliviar.
La recesión hará que EEUU crezca en torno al 0,5%, muy por debajo de lo estimado el año pasado cuando se proyectó un incremento del 2% para la mayor economía del planeta.
La crisis del país del norte será amortiguada por el potente y sostenido crecimiento de China. El gigante asiático no se detendrá y crecerá este año y el próximo a tasas en torno al 9,5%, lo que impulsará el crecimiento de aquellos países que se han volcado a buscar mayores vínculos con Pekín, una tarea que México tiene pendiente.
La teoría del relevo evitará un estancamiento global de la economía impulsando a los países exportadores de materias primas, en especial Argentina y Perú que crecerán 7%; Brasil 4,8%: Venezuela 5,8%; España 1,8% y Chile 4,5%.
A modo de referencia cabe destacar la regla del 7 que se aplica en economía: un país que crece al 7% anual duplica en diez años su PIB; pero si crece al 10% lo duplica en 7. Asimismo, un país que crece al 3,5% tarda veinte años en duplicar su nivel de ingreso.
La economía estadounidense reducirá su crecimiento a tasas de apenas 0,5% para este año y el próximo producto de la crisis en el sector inmobiliario y financiero. La caída de los precios en el valor de la vivienda llega al 20%, lo que implica una pérdida de la quinta parte de su valor, mientras el valor de la hipoteca se ha duplicado producto del alza en la tasas de interés. A esto se añade la contracción en la demanda (que aporta dos tercios del PIB) como consecuencia del desempleo y la inflación que avanzan galopantes.