Mientras Trump busca distraer al pueblo estadounidense, premian a una figura que llama a una invasión a Venezuela. No la premian con el Nobel de Business sino con el "Nobel de la Paz"
Jorge Majfud, La Haine
En 2002, el presidente democráticamente electo de Venezuela, Hugo Chávez, fue secuestrado por militares golpistas y recluido en la isla La Orchila. Corina Machado, varios empresarios, el New York Times y otros medios europeos apoyaron el golpe. La derecha proclamó a Pedro Carmona (empresario y miembro del Opus Dei) como nuevo presidente. Carmona decretó la disolución de la Asamblea Nacional, la Corte Suprema y otras instituciones. Machado firmó la declaración de apoyo a esas medidas.
El New York Times saludó el golpe encabezado por "un respetado hombre de negocios", el que tenía como propósito acabar con la dictadura electa en Venezuela. Según documentos desclasificados, la CIA sabía que George Bush sabía. El 25 de abril, el Times informó que el dinero para la agitación social previa al golpe había sido canalizado por terceros, como la ONG Demócrata 'National Endowment for Democracy', con 877.000 dólares.
Según un cable del 13 de julio de 2004, organizaciones como la USAID habían enviado casi medio millón de dólares para proveer "entrenamiento para los partidos políticos". El cubano Otto Reich (uno de los organizadores del acoso de los Contras en Nicaragua y parte de la maniobra Irán-Contras) fue otro encargado de contribuir con el golpe.