Emir Sader, Público
Desde finales del siglo pasado y, sobretodo, desde comienzos de este siglo se han instalado en América Latina gobiernos que son producto del fracaso del neoliberalismo. En la última década del siglo XX, amplios movimientos han resistido a los gobiernos neoliberales, hasta que, llegada la hora de construir alternativas, ha habido diferencias en el seno de la izquierda.
Algunos han preferido distanciarse de esa construcción tanto con eslóganes de impacto -“Que se vayan todos”, de los piqueteros argentinos-, como con visiones intelectualistas -“autonomía de los movimientos sociales” o “cambiar el mundo sin tomar el poder”-. Otros se han lanzado a la disputa de la hegemonía en la sociedad, construyendo alternativas nuevas, como en Ecuador y en Bolivia, o concentrando fuerzas en alternativas de la resistencia al neoliberalismo, como en Venezuela, Brasil, Argentina, Uruguay.