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jueves, 24 de abril de 2008

Y todo por una...

Por intentar ganarse unos pesitos extra, utilizando un vehículo fiscal para fines privados, la subsecretaria de transportes Elinett Wolf Rioseco fue despedida de sus funciones en el gobierno. La reemplezante de Danilo Nuñez utilizaba el vehículo que la trasladaba desde su casa al ministerio para transportar frambuesas que distribuía entre cafés y restaurantes del centro de Santiago.

Independientemente de que el sueldo de un subsecretario del Estado debe ser muy miserable (aunque bastante por sobre la media del 80% de los trabajadores del país, que bordea los $300.000) y haya que realizar otras actividades para mantenerse a flote, lo cierto es que cuando se acepta ese tipo de cargos, que de por sí tienen otros valores como el contacto con el poder, las decisiones, y el sentir que se está mojando la camiseta por el país, hay que tener en claro que se debe tener una conducta intachable. Y eso es lo que le está penando a la Concertación que tras 18 años acusa desgaste, fatiga de material, falta de gente e ideas nuevas.

Se entiende que haya que buscar otros negocios y emprender.., pero ¿no había algún pariente o amigo que asumiera la tarea? A modo de ayuda: la primera lección del emprendedor es saber delegar. Saber crear equipos de trabajo que funcionen y hagan las cosas bien o mejor que uno mismo, es la clave. Esa es la gran tarea que pena en Chile, desde los equipos de fútbol hasta los organismos del Estado.

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