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sábado, 12 de octubre de 2024

Estados Unidos: el cajero automático ilimitado para los crímenes de Israel

"En el momento en que Estados Unidos comience a percibir que su proyección de imperio mundial cuesta más de lo que recompensa, algunas de las vías fluviales de políticos, periódicos y ejércitos complacientes en todo el mundo podrían secarse".

Andrea Zhok, L'Anti Diplomatico

También esta noche Israel realizó su especialidad militar: el bombardeo de zonas urbanas indefensas.

Incluso esta noche, los edificios se derrumbaron y murieron decenas de civiles que no habían querido o no habían podido salir de Beirut (porque, según la doctrina israelí de enfrentamiento, cualquiera que se encuentre cerca de un sujeto presuntamente hostil a Israel se convierte automáticamente en un cuerpo en peligro creciente)

Dado que el único ataque iraní en respuesta a Israel no parece haber causado víctimas civiles, en las portadas fotocopiadas de Stampa, Corriere y Repubblica con referencia a Oriente Medio sólo aparece una reflexiva reflexión sobre el consentimiento estadounidense a bombardear pozos petroleros. aparece iraní ("Cuando hace falta, hace falta...").

Israel parece tener prisa por reducir Beirut y Gaza, donde el último boletín mostraba el 80% de las viviendas destruidas o inhabitables, 1,9 millones de personas desplazadas, 41.788 muertos y 96.794 heridos.

Ayer Irán emitió otra declaración en la que explica muy claramente que no quiere una guerra regional y que, a falta de nuevas provocaciones, no habrá más ataques en suelo israelí.

Pero a pesar de la moderación de la respuesta iraní, está claro que se producirá un relanzamiento del lado israelí, porque los dirigentes israelíes quieren una guerra regional total.

Más allá de las quejas superficiales estadounidenses, Israel sabe de hecho que cualquier administración estadounidense seguirá actuando como un cajero automático ilimitado en términos de armas y dinero. Y con semejante guardaespaldas, el proyecto del Gran Israel está a la vuelta de la esquina.

A menos que sea el propio cajero automático el que se desestabilice.

Junto con la actitud rusa, esta es de hecho - la capacidad estadounidense de actuar como cajero automático sin límites de gasto para sus representantes - la variable más relevante en este momento en el escenario de Medio Oriente (y de hecho global).

Así, por ejemplo, sucede que, junto con los alegres bombardeos diarios de las FDI, Carolina del Norte en los EEUU sufre una inundación catastrófica, y la administración federal destaca por su inacción. La FEMA (Agencia Federal para el Manejo de Emergencias; la Protección Civil Estadounidense) parece hasta ahora carecer del personal y los recursos para intervenir de manera significativa una semana después de la inundación. Como dirían en Italia: "La manta es corta y habéis vivido por encima de vuestras posibilidades, mendigos".

Pero hay muchas voces dentro de Estados Unidos que se preguntan cómo es posible que en las mismas horas en que Israel recibió otro préstamo no reembolsable de 8.700 millones de dólares para apoyar su campaña militar, FEMA se quejara de la falta de recursos.

En el momento en que Estados Unidos comience a percibir que su proyección de imperio mundial cuesta más de lo que gana, algunos de los canales de irrigación de políticos, periódicos y ejércitos complacientes en todo el mundo podrían secarse.

Y una nueva era tocaría a la puerta.


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