A tres semanas de la explosion y hundimiento de la torre de perforación petrolera en el Golfo de México, podemos decir que estamos ante un desastre medioambiental sin precedentes. Se estima que el flujo continuo de petróleo que emana desde las profundidades (a 2.000 metros de profundidad) llega a los 5.000 barriles diarios, es decir 200.000 galones o 800.000 litros.
Puede ver más información en mi post anterior, post anterior, y también en este interesante artículo de Cristóbal Cervantes en Espiritualidad y Política.
Alan Taylor ha colgado 40 imágenes de esta catátrofe en The Big Picture
Hola Marco Antonio, en primer lugar gracias por la cita, en cuanto al tema en cuestión, me sorprende la poca repercusión que está teniendo en los medios, sobre todo por las consecuencias económicas que puede traer este derrame de petróleo si se alarga en el tiempo, de hecho el petróleo ya está cerca del punto de entrada y salida de barcos por la desembocadura del río Mississippi, por donde pasa el 60% del grano exportado por EE.UU. entre otras cosas, la acumulación de petróleo impide el tráfico marítimo, el precio del petróleo y de las materias primas alimentarias puede subir y afectar gravemente a la economía mundial, que en estos momentos de crisis puede ser un golpe muy fuerte, pero son sólo opiniones personales,
ResponderBorrarfelicidades por tu siempre magnífico blog, un abrazo