Umberto Mazzei, Alainet
La Unión Europea, como es bien sabido, tiene un gran problema por la lenta fabricación de las vacunas contra la pandemia Covid-19. Tres vacunas aprobadas hasta ahora por el bloque se ven afectadas por el déficit de producción. Entonces, ¿por qué la UE no aprovecha el jab ruso para ayudar a acelerar la inoculación?
Los funcionarios en Bruselas han afirmado que Rusia no ha presentado datos suficientes sobre su vacuna Sputnik V, para que la Agencia Europea de Medicamentos, el organismo regulador, le dé luz verde para su administración.
Sin embargo, los fabricantes rusos del Sputnik V sostienen que han seguido todos los requisitos de datos necesarios establecidos por la EMA.
Entonces, ¿porque el atasco?
La fórmula rusa ha demostrado su eficacia contra la enfermedad. Un estudio publicado en la revista médica revisada por pares, The Lancet, encontró que Sputnik V tiene un 92% efectividad y es segura contra casos sintomáticos de Covid-19 en el único ensayo a gran escala.
El tratamiento ruso es comparable en eficacia a las tres vacunas aprobadas hasta ahora por el regulador europeo: las producidas por las farmacéuticas occidentales AstraZeneca, Moderna y Pfizer-Bio-Tech.
También existe una creciente conciencia en toda Europa de que el Sputnik V puede desempeñar un papel importante en la aceleración del programa de vacunación para inocular a toda la población del bloque.
Líderes políticos de Alemania, Francia e Irlanda Hungría y República Checa, entre otros, han expresado su voluntad de incorporar la vacuna rusa Sputnik V en sus planes nacionales de vacunación contra el COVID.
La Sputnik V existe y está siendo inyectada en Rusia desde noviembre 2020 y la Unión Europea sigue sin reconocerla.
La vacuna de Johnson&Johnson es la más reciente. Fue aprobada por la FDA en Estados Unidos hace solo un par de semanas y a la semana siguiente ya estaba aprobada por la Comisión Europea.
El gobierno “Progresista” de España que mantiene aterrorizada a la población con mención permanente de los muertos por COVID en los medios del gobierno se apresuró a comprar por la urgencia, (marzo) varios centenares de millones de Euros de la vacuna Jansen, como ahora llaman a esa última vacuna. Si hay tanta urgencia, convendría recordar a Mr. Sánchez que la Sputnik V está disponible, para la venta, desde enero.
Gente como Jessica Von der Lyden, presidenta de la Comisión Europea, privilegian la ideología antirusa de la OTAN, por encima de la salud de los europeos.
Orban, en Hungría, es un ejemplo de cómo ignorar a los rusófobos de Bruselas, como suele hacer y dar prioridad a la salud de los húngaros y viene vacunando con la Sputnik V desde febrero.
Los checos también están haciendo acopio de Sputnik V, sin esperar la aprobación burocrática de Bruselas, como quiere Von der Leyen. Es la estupidez de gente como ella, lo que desacredita a la Unión Europea y la presenta como la máscara política de la OTAN, que sólo sirve para disimular la ocupación militar de Europa por Estados Unidos desde 1944 y hacer que los vasallos europeos paguen por ello.
Rusia es la única potencia histórica europea, que tradicionalmente salva a Europa de la tiranía. Es de esperar que la lucidez prevalezca sobre los prejuicios y la obstinación anti rusa heredada de la Guerra Fría.
La población europea está harta de cuarentenas y demás medios de presión que no tocan otro tema que los balances del COVID, para justificar una vacunación obligatoria. Vacunación Obligatoria pero solo con vacunas elaboradas en países de la OTAN.
La vacuna rusa Sputnik V fue la primera vacuna contra el COVID- por lo tanto, la que mayor cantidad de datos de prueba tiene y eso ha demostrado que es efectiva en un 92%. También es la más barata y la que tiene más largo tiempo en producción; por lo cual existe una cantidad suficiente de dosis para vacunar varias decenas de millones de personas inmediatamente.
La población europea está inquieta y desesperada por volver a la vida normal de antes de la Pandemia y la habitual productividad económica. Sin embargo, teniendo la solución a la mano con la vacuna rusa la Comisión Europea tiene una sospechosa resistencia a dar la aprobación para la Sputnik V en paridad con las vacunas elaboradas en países de la OTAN.
El argumento de Bruselas es que no se ha probado su efectividad. Eso es mentira y hay prueba de que la propia Comisión sabe lo contrario.
Hace poco la UE mandó a su Comisario de Relaciones Exteriores, Josep Borrrell, a Moscú, para proponer que la vacuna rusa sería aceptada por la UE siempre que Rusia permitiese que la elaborase en laboratorios farmacéuticos de países de la OTAN (UE+USA), de modo que la objeción a la Sputnik V no obedece a dudas sobre su efectividad y eficacia.
"La objeción es a que sea elaborada por laboratorios rusos. No creo que sea por algo relacionado con la repartición de los beneficios económicos; porque sobre eso es fácil ponerse de acuerdo. Temo que sea porque los laboratorios rusos jamás aceptarían añadir algo por instrucciones de la OTAN", señaló el Ministro de Relaciones ruso Sergei Lavrov que suele ser muy cauto y moderado en sus expresiones de desacuerdo.
Algo muy escandaloso debió proponerle Borrell para que Lavrov, en la rueda de prensa después de la entrevista, mostrase su irritación con un mensaje a Bruselas. El comedido Lavrov dijo a los periodistas, delante de Borrell, que la Unión Europea es un socio que no merece confianza.
Quien haya seguido lo que escribo sabe que siempre he vinculado la narrativa orquestada por los grandes medios, la OMS y la Comisión Europea para exagerar la peligrosidad del Coronavirus (mortalidad 1% de infectados) con el propósito de imponer el mundo la inyección de una vacuna, hecha en la OTAN, cuyos resultados son obviamente indeseables, porque entonces no sería necesaria la campaña de miedo. Otro motivo es justificar las medidas de prevención tomadas en violación de derechos humanos y constitucionales e intereses económicos vitales, para culparlas por la próxima grave crisis económica mundial que obedece a los estertores del endeudado dólar que expira como moneda internacional de referencia.
Para unos pocos países la pandemia es una tragedia humana, para otros es un asunto politico porque resta voto a los sinverguenzas de turno en el poder y por lo que hemos visto para algunos países mas desarrollados es solo un negocio que no se puede desperdiciar.
ResponderBorrarPor eso se da vueltas y vueltas al asunto.
A costa de no salvar vidas europeas la UE privilegia los intereses económicos de las farmacéuticas estadounidenses por encima de la salud de sus ciudadanos. Por otro lado se subordina al capataz OTAN sumándose a la guerra híbrida contra Rusia
ResponderBorrar