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lunes, 7 de septiembre de 2015

China reconoce la mayor caída de sus reservas de la historia para mantener el yuan a flote


Las reservas de divisas extranjeras en China bajaron por cuarto mes consecutivo a finales de agosto, cuando se situaron en 3,56 billones de dólares (3,2 billones de euros), anunció hoy el Banco Central de China. Esto supone un descenso de casi 100.000 millones de dólares en en un sólo mes, el mayor descenso de la historia en un mes de las reservas de China. La caída de la confianza en el gigantes asiático está desembocando en oleadas de ventas de dólares y en la caída de los índices bursátiles del país. En estas dos batallas, las autoridades chinas están gastando cientos de miles de millones de dólares en un intento por contrarrestar la fuerza de los mercados.

La cifra supone que las reservas en monedas exteriores bajaron el mes pasado en unos 93.900 millones de dólares (84.000 millones de euros). El descenso de agosto se debió a la intervención del banco central chino en los mercados domésticos de divisas para apoyar su moneda, el yuan, y evitar así que se depreciara en exceso, según coinciden varios analistas económicos citados por medios chinos. El yuan fue devaluado casi un 2% el pasado 11 de agosto, tras lo cual el Banco Popular de China permitió que continuara depreciándose durante dos días más hasta que dio por concluido el ajuste.

La bolsa de China lleva acumulando fuertes correcciones desde que a mediados de junio alcanzara una de las cotas más altas de su historia. Con el desplome de los índices bursátiles, el Gobierno inició una 'guerra' contra esta tendencia bajista que por el momento parece haber perdido tras la rendición (o quizá sólo tregua) anunciada hace escasos días, cuando los autoridades anunciaron que iban a dejar de intervenir para amortiguar la caída de la Bolsa.

Según publicó el Financial Times, la autoridades del gigante asiático han gastado unos 200.000 millones de dólares intentando sostener el precio de las acciones. Aunque el organismo que se encarga de intentar mantener a flote los principales índices del país aún tiene munición, puede que el Gobierno chino haya decidido capitular y dejar que las fuerzas de mercado sean las que decidan el precio que corresponde a las acciones chinas. Hoy, la bolsa de Shanghái ha cedido otro 2,52% pese a los mensajes de calma del Gobierno, que no logran calmar la ola vendedora.

Los líderes de Pekín parecen estar dejando actuar a las fuerzas del mercado, que sean éstas las que regulen el precio de las acciones. Una decisión que según el Financial Times ha llegado tarde, después de haber 'despilfarrado' unos 200.000 millones de dólares. Tal y como explicó el premio Nobel de Economía Michale Spence, la burbuja bursátil china había que dejarla estallar, luchar contra la fuerza de la gravedad es costoso y a veces puede resultar imposible.

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