Mostrando las entradas con la etiqueta Hiroshima. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Hiroshima. Mostrar todas las entradas

lunes, 30 de mayo de 2016

¿Paloma de guerra?

David Brooks, La Jornada

El premio Nobel de la Paz viajó a Vietnam la semana pasada, país que resistió una de las guerras más largas de la historia moderna donde perecieron más de un millón y tal vez hasta 2 millones de vietnamitas y unos 58 mil militares estadunidenses, y, al reconocer las heridas y buscar cerrar este capitulo bélico, ofreció no una rosa, ni un ramo de olivo, ni palomas de la paz, sino… armas.

Más de medio siglo después del inicio de la intervención militar estadounidense en el sureste asiático, el presidente Barack Obama visitó Vietnam en actos de fuerte simbolismo tanto para ese país, y su pueblo, el cual aún padece las secuelas de esa guerra, sobre todo el uso del equivalente de armas químicas como el Agente Naranja y heridas permanentes por el lanzamiento de más bombas que el total arrojado sobre Alemania, Japón e Italia por los aliados en toda la Segunda Guerra Mundial (algunas de las cuales no detonadas siguen estallando y matando). Ahí siguen las imágenes imborrables del uso de armas tan brutales como el napalm para quemar a la población civil, incluidos los niños. Es ese mismo país donde ahora el presidente y otros políticos estadounidenses creen tener la autoridad moral para atreverse a criticar las violaciones de derechos humanos.

Pero la noticia con que culminó el viaje histórico, cuyo objetivo era festejar el inicio de una nueva relación y superar el pasado, fue que Obama anunció que Estados Unidos suspenderá el embargo a la venta de armas a Vietnam. Ese era el regalo que llevaba el premio Nobel de la Paz.

Contradicciones nucleares de Obama: va a Hiroshima y elude Nagasaki

Alfredo Jalife-Rahme, La Jornada

Una de las características de la personalidad múltiple del presidente saliente Obama es su conducta contradictoria en general, y que resalta en el delicado tema nuclear, en particular.

Obama arribó a la Casa Blanca con las óptimas expectativas para resolver la grave crisis financiera de 2008 que heredó de su antecesor, y acabó arrojándose a las fauces de los lobos de Wall Street, a quienes rescató, en detrimento de los ahorros de la mayoría afectada de los ciudadanos, lo cual ha detonado estruendosamente en la revuelta en las atípicas primarias presidenciales.

De todos sus discursos, supuestamente amigables al Islam, desde Turquía hasta Egipto, sólo quedan cenizas y un Medio Oriente pulverizado.

El mundo que lega Obama es de un caos global, con intensas provocaciones a sus competidores Rusia y China, y que quizás estuvo al borde de desatar una tercera guerra termonuclear, como señaló el año pasado en Sarajevo el papa jesuita argentino Francisco, quien opera en sentido contrario al papa polaco rusófobo Juan Pablo II, gran aliado de los halcones de Washington.

martes, 11 de agosto de 2015

Hiroshima y Nagasaki 70 años después de la bomba atómica

Amy Goodman, Denis Moynihan, Alainet.org

Hace 70 años, el 6 de agosto de 1945, el mundo cambió para siempre. Ese día, Estados Unidos lanzó por primera vez en la historia un arma nuclear contra población civil, la de Hiroshima, en Japón. Tres días más tarde lanzó la segunda y, hasta ahora, última bomba atómica utilizada contra objetivos humanos en Nagasaki, Japón. Cientos de miles de personas murieron, muchas sufrieron quemaduras graves y miles fueron víctimas de los efectos de largo plazo del envenenamiento por radiación. Muchos sobrevivientes de las dos terribles explosiones, denominados “hibakusha” en japonés, aún están vivos y cuentan sus experiencias. Mientras que el mundo ha evitado ataques nucleares desde aquellos días de 1945, la amenaza de una potencial devastación nuclear permanece aún latente. Sin embargo, de las cenizas de estas dos terribles explosiones surgió un movimiento a favor de la abolición de las armas nucleares que sigue llevando adelante su campaña pacifista para eliminar estas armas.

viernes, 7 de agosto de 2015

Hiroshima y Nagasaki, a 70 años del holocausto nuclear


Marcos Roitman Rosenmann, La Jornada

Sombras nucleares: con este eufemismo los científicos denominaron los vestigios de cuerpos humanos situados a menos de 200 metros del epicentro. Sólo sombras. La desintegración fue inmediata. El destello de luz y calor generado por la liberación de la energía atómica alcanzó 4 mil grados centígrados, con vientos de mil kilómetros por hora. A medida que la onda expansiva cubría las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, las casas y edificios explotaban y ardían; el resto de construcciones vio fundir metales como acero, hierro, cobre, latón, etcétera. Por primera vez la población civil era el objetivo de la fuerza desatada por la fisión nuclear. Entre las ruinas de Hiroshima se contabilizaron 70 mil muertos; otras tantas personas sufrirían quemaduras a consecuencia de la radiactividad. En medio de la desesperación, los sobrevivientes tampoco pudieron acudir a los centros médicos; según los datos, en Hiroshima existían 45 hospitales, tres quedaron operativos. En los años posteriores se calcula que en Nagasaki las víctimas superaron las 80 mil personas.

jueves, 6 de agosto de 2015

A 70 años del ataque nuclear de Estados Unidos a Hiroshima y Nagasaki


Este jueves 6 y el próximo domingo 9 de agosto, la humanidad conmemora el único caso de uso bélico de armas nucleares en su historia: el bombardeo de las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki por parte de Estados Unidos. Agresiones de este tipo no tienen fecha de caducidad y hoy, 70 años después, los ataques deben reconocerse como un crimen de lesa humanidad, que ha provocado cáncer, mutaciones genéticas y mortalidad infantil. Un crimen perpetrado por Estados Unidos que aún no es sancionado. Un acto de vandalismo sin sentido que debió llevar a presidio perpetuo a todos sus autores, incluyendo al presidente de Estados Unidos, Harry Truman. Si Hitler hubiera destruido con armas químicas alguna ciudad europea esto habría formado parte de los Juicios de Núremberg. Sin embargo, a Estados Unidos se le permitió arrasar con dos ciudades enteras, y eliminar a más de cien mil personas de una sola estocada, sin ningún castigo, con total impunidad... Hay que recordar estos hechos vergonzosos porque Estados Unidos trata de borrar la memoria sobre Hiroshima y Nagasaki y su horroroso genocidio que demuestra el más brutal desprecio por la humanidad.

miércoles, 5 de agosto de 2015

Hiroshima y Nagasaki: la era nuclear


Alejandro Nadal, La Jornada

El Almanaque de granjeros revela que el 31 de mayo de 1945 fue un bonito día en Washington. Las condiciones eran agradables: el sol brillaba y por la mañana soplaba una suave brisa desde el noroeste. Era un día esplendido para discutir el empleo de las armas nucleares que Estados Unidos estaba desarrollando.

Ese día se llevó a cabo en las oficinas del Departamento de Guerra una importante reunión del comité interino sobre el uso de armas nucleares. El comité era un organismo ad hoc, formado por el presidente Truman para determinar el mejor blanco para el naciente arsenal nuclear estadunidense y definir el uso de la bomba atómica en las relaciones con Rusia una vez concluida la guerra. La reunión comenzó a las 10 de la mañana (las minutas de las reuniones).

domingo, 8 de agosto de 2010

Hiroshima y el nacimiento del terrorismo de estado

Este artículo de Atilio Borón se suma al de Jacques R. Pauwels que señala que las bombas atómicas contra Hiroshima y Nagasaki fueron lanzadas por Estados Unidos con el único propósito de humillar a Japón y la Unión Soviética.


El 6 de Agosto se cumplieron 65 años del ataque nuclear de Estados Unidos a la ciudad de Hiroshima, una monstruosidad si precedentes que, tres días después, se reiteraría al arrojar otra bomba atómica sobre la ciudad de Nagasaki. En un primer recuento ambas deflagraciones mataron unas 220.000 personas, 140.000 en Hiroshima y 80.000 en Nagasaki. La abrumadora mayoría de las víctimas fueron civiles, dado que para ese entonces las dos ciudades no albergaban significativos contingentes militares. Aproximadamente la mitad falleció de inmediato, el mismo día de los bombardeos. En su edición de hoy al dar cuenta del nuevo aniversario el New York Times comenta que las víctimas instantáneas murieron a causa de la excepcional intensidad de la explosión que redujo la ciudad a cenizas y literalmente vaporizó sus cuerpos, dejando apenas espectrales huellas y sombras en las pocas paredes que quedaron en pie. El resto fue falleciendo a lo largo del tiempo a causa de horribles quemaduras y los efectos de la radiación, que los condenó a una lenta y dolorosa agonía. El recuento actual de las víctimas que murieron a causa de los dos bombardeos llegaba, en el año 2008, a poco más de 400.000 personas y es muy probable que la cifra aumente levemente en los próximos años. Hasta el día de hoy, los de Hiroshima y Nagasaki son los únicos ataques nucleares de la historia, pero la desorbitada proliferación de armamentos nucleares hace temer por una reiteración de tan trágica experiencia. De hecho, la flota naval estadounidense-israelí que se encuentra al acecho en el estrecho de Ormuz, dispuesta a atacar a Irán, dispone de un formidable arsenal atómico. El Comandante Fidel Castro alertó sobre el riesgo de un holocausto nuclear y le advirtió al Presidente Barack Obama que una vez que de la orden de atacar se pasaría el punto de no retorno y se desencadenaría un conflicto internacional de incalculables y lúgubres proyecciones. Por otra parte, existen fundadas sospechas que las siete bases militares que Álvaro Uribe puso a disposición de Estados Unidos puedan también contar con armamento nuclear. Por algo hay una enconada resistencia a que una delegación de la Unasur pueda inspeccionar dichas bases.

jueves, 6 de agosto de 2009

A 64 años del terror de Hiroshima


Hace 64 años una masacre cobró forma. El 6 de agosto de 1945 la aviación estadounidense lanzaba el primer bombardeo atómico de la historia sobre la población civil de la ciudad japonesa de Hiroshima en el final de la Segunda Guerra Mundial.

La ofensiva causó la muerte de cerca de 140.000 personas. No obstante, esta cifra ha ido ascendiendo hasta superar actualmente los 258.300, debido a enfermedades causadas por la radiación. Tres días después se repetía este mismo ataque sobre Nagasaki.

Hoy jueves, miles de personas se congregaron en el Parque de la Paz de Hiroshima para guardar un minuto de silencio por las víctimas a la misma hora de la tragedia -las 8.15 de la mañana, hora local (23.15 GMT del miércoles)-, según la agencia local de noticias 'Kyodo'.

Otra lectura: Hiroshima y el genocidio estadounidense
Imágenes inéditas sobre la masacre de Hiroshima

miércoles, 6 de agosto de 2008

Hiroshima, a 63 años del genocidio estadounidense


Con un minuto de silencio, ulular de sirenas y el vuelo de palomas, recordaron en Hiroshima los horrores vividos por sus habitantes hace 63 años, tras el ataque nuclear de Estados Unidos. En esta ciudad martir, más de 45 mil personas se reunieron en el Parque de la Paz para rendir homenaje a los centenares de miles de víctimas que el 6 de agosto de 1945 sufrieron los efectos radioactivos del chantaje atómico ideado por el Pentagono. En esa fatídica mañana de 1945, un bombardero B-29 lanzó la bomba de tres metros de largo, cuatro toneladas de peso y un kilo de uranio-235, que explotó a unos 600 metros de altura.

Miles de edificios, viviendas y hospitales junto a 70 mil personas se volatilizaron instantáneamente. Había 300 médicos, de los cuales 60 murieron y otros 210 resultaron lesionados. Los puestos asistenciales, y urgencias, así como los 18 hospitales desaparecieron.

Otras 110 mil mujeres, hombres y niños fallecían pocos días después carbonizadas o mutiladas. Hiroshima quedaba borrada del mapa.

No satisfecho aún con la barbarie, el Pentágono lanzó un segundo artefacto nuclear sobre la ciudad de Nagasaki el 9 de agosto, que causó otras 70 mil víctimas mortales.

En su intervención, el alcalde de Hiroshima, Tadatoshi Akiba, instó al primer ministro Yasuo Fukuda, presente en el acto, a trabajar por conseguir el desmantelamiento de todos los arsenales nucleares del mundo, de acuerdo con la agencia de noticias Kyodo.

Akiba, recordó en su discurso que Estados Unidos fue uno de los tres únicos países que se opusieron a la propuesta presentada por Japón ante la ONU para abolir las armas nucleares.

"Sólo podemos esperar que el presidente de Estados Unidos que sea elegido en noviembre próximo escuche con conciencia a la mayoría, para quien la principal prioridad es la supervivencia humana", expresó.

Por su parte, Fukuda compartió los sentimientos de Akiba al indicar que quiere ponerse al frente de una campaña contra las armas nucleares y tratar de ayudar a quienes sufran de precarias condiciones de salud tras haber sido expuestos a la radiación

martes, 6 de mayo de 2008

Imágenes inéditas de Hiroshima

Exhiben imágenes inéditas sobre la tragedia nuclear en Hiroshima

Las imágenes en las que aparecen miles de cadáveres, fueron halladas en una cueva a las afueras de Hiroshima por el soldado estadunidense Robert L. Capp, quien las donó al Instituto Hoover.


Una colección de diez fotografías inéditas que exhiben la devastación y la masacre que dejó el bombardeo atómico de Estados Unidos sobre la ciudad de Hiroshima, en Japón, fueron difundidas hoy por el Instituto Hoover.

Las imágenes en las que aparecen miles de cadáveres, fueron tomadas por un desconocido fotógrafo japonés y encontradas en una cueva en las afueras de Hiroshima, en 1945, por el soldado estadunidense Robert L. Capp, quien las donó al Instituto Hoover en 1998 con la condición de que no fueran publicadas sino hasta el año 2008.

Tres de las imágenes habían sido reproducidas ya en el libro Atomic Tragedy bajo el permiso de la familia Capp, pero sólo desde hoy se puede conocer la serie completa.

Las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki fueron bombardeadas por la aviación estadunidense hacia el final de la Segunda Guerra Mundial el 6 de agosto de 1945, en el fatídico vuelo del Enola Gay, en un ataque de exterminio que cobró la vida de más de 150 mil habitantes dejando 300 mil heridos y mutilados. Las explosiones crearon una estela de radiación que hasta la fecha continúa causando la mutación genética de la población japonesa.

La colección de las imágenes donadas por Robert L. Capp pueden verse en la siguiente dirección electrónica:

Imágenes inéditas sobre la masacre atómica de Hiroshima

LinkWithin

Blog Widget by LinkWithin